Blog El Descorche de La Prensa del Rioja
Texto: Javier Pascual, Director
El vino es uno de los tres productos con mayor incremento de ventas (42%) según un estudio de la App Gelt sobre las compras para la cuarentena.
El sector del vino de Rioja no escapa a las previsiones catastrofistas con que nos bombardean a diario desde todos los ámbitos, sean oficiales, oficiosas e incluso sospechosas de poca fiabilidad. La debacle económica generalizada a la que nos está abismando la pandemia del coronavirus se cebará con muchos sectores productivos y ya ha puesto en alerta a bodegueros y viticultores por los efectos inmediatos que están teniendo medidas como el cierre de la hostelería y la paralización de las exportaciones. En este oscuro panorama aparece como una ventana abierta a la esperanza un dato constatado por estudios sobre el comportamiento de los consumidores durante estas semanas que llevamos bajo el impacto de la pandemia: el importante incremento que se está produciendo del consumo de vino en el hogar. Según un estudio de la App Gelt, el vino ha sido durante los primeros 15 días de marzo uno de los tres ‘productos comprados para la cuarentena’ con un mayor crecimiento de ventas (42%).
Ante las incertidumbres que presenta la situación actual, tanto para las personas como para las marcas, es fundamental comprender cómo se sienten y actúan los consumidores y, consecuentemente, cómo tienen que actuar las marcas. Las empresas de estudios de mercado han acometido de inmediato la búsqueda de respuestas a estos interrogantes, como es el caso del Barómetro Covid-19 de la consultora ‘Kantar’, que recoge la opinión de más de 25.000 personas en más de 50 países acerca de sus preocupaciones, miedos y expectativas, así como los cambios en sus hábitos de compra. Igualmente plantea cómo deberían responder las marcas en función de cómo está evolucionando el comportamiento de las personas en el tiempo y cómo están respondiendo a las actividades de la marca. “Después de un primer momento de aprovisionamiento de productos básicos como agua, leche, conservas, lejías, desinfectantes, jabón de manos o papel higiénico, se han ido incorporando productos complementarios y de ocio”, explican desde Kantar. “Los consumidores añaden a su cesta ‘productos de indulgencia’ como chocolate, aceitunas, vino y cerveza para permitirse algunos momentos de placer durante el confinamiento en casa”.
Según revela el estudio de la App Gelt, los consumidores españoles realizaban durante los primeros días de la crisis sanitaria lo que los expertos denominan “compra de búnker”, un aprovisionamiento de víveres para un periodo de aislamiento en casa que ha disparado el consumo de alimentos no perecederos y productos de higiene. ‘Los productos comprados para la cuarentena’ en los supermercados que más han aumentado sus ventas han sido: leche en polvo (173%), amoniaco (85,7%), vino (41,9%), lejía (36,8%), alcohol (26%), pasta (17%) y conservas (16,8%). Por otra parte, los datos obtenidos por Gelt tras analizar las compras en supermercados de toda España indican que el ticket medio experimentó un aumento exponencial en paralelo a la propagación del virus: 38% en las últimas tres semanas y con tendencia creciente.
Esta es la buena noticia para los productores de vino, cuyo consumo seguirá una tendencia positiva que seguramente no compensará, pero si aliviará, el bloqueo de la hostelería y la exportación. También alivia que el vino no sea un producto perecedero, ya que proporciona un mayor margen de maniobra ante la futura recuperación del consumo en sectores como la hostelería -lastrado, eso sí, por la recesión económica que vamos a padecer- y la voluntad de ‘reponer’ las existencias de esas cavas domésticas de las que estamos dando buena cuenta. Llegar a esa etapa de la recuperación supondrá todo un reto y pondrá a prueba el ‘músculo financiero’ de cada bodega, una industria alimentaria que ha recibido tal consideración por parte del Gobierno para continuar su actividad productiva.