Una treintena de expertos valoran en Barcelona la combinación de vinos blancos riojanos con quesos catalanes.

Una treintena de sumilleres y periodistas especializados en vino y gastronomía de la ciudad condal se dieron cita en el elegante marco del Palacete Abadal para catar una selección de siete vinos blancos de Rioja de diferentes tipos y añadas con siete quesos de Cataluña, cada uno de un estilo y elaboración muy distinta. Esta cata-maridaje ha ofrecido un resultado sobresaliente desde el punto de vista organoléptico en opinión de los expertos participantes, que han valorado unánimemente la originalidad de la cata y la combinación tan armoniosa entre los aromas y sabores de vinos blancos y quesos, que se complementaban y enriquecían mutuamente.

 

«Cataluña, que está viviendo una revolución en cuanto al nivel y calidad de sus quesos, tiene una larga tradición de pequeñas queserías artesanas repartidas por toda su geografía, desde las zonas pirenaicas del Alt Urgell, Cerdanya y Val D´Aran, hasta Pallars Jussac en Lleida, Albioc y Valle del Ebro en Tarragona, Terradelles en Girona, que ofrecen una gama de quesos novedosos y con personalidad», afirmó la directora de la cata y especialista en quesos Guillermina Sánchez. Por su parte, el periodista Enrique Calduch, organizador de la cata, destacó que “Rioja dispone de un elenco de vinos blancos de gran calidad, desde los jóvenes afrutados para maridar con quesos frescos de fina acidez, a los fermentados en barrica o los criados con largo envejecimiento, capaces de hacer frente a todo tipo de quesos curados de cabra, oveja o vaca”. En su opinión la combinación es perfecta porque «los vinos blancos de Rioja permiten una óptima valoración de las cualidades organolépticas de los quesos».

La iniciativa se enmarca dentro de la estrategia global de la D.O. Calificada Rioja de potenciar su oferta de vinos blancos, iniciada hace siete años con la renovación varietal y posterior autorización de nuevas plantaciones. El director general del Consejo Regulador, José Luis Lapuente, destacó especialmente que “la calidad de nuestros vinos blancos está ligada a una identidad propia, una personalidad diferenciada que va desde los clásicos con envejecimiento en barrica y la gama actual de vinos más vanguardistas”. También recordó que los vinos blancos elaborados en esta última cosecha 2014 darán que hablar, ya que «han sido considerados unánimemente de excelente calidad por los comités de cata que realizan la calificación». Las ventas anuales de vinos blancos de Rioja se sitúan en torno a 15 millones de litros, un 6% de las ventas totales de Rioja.