El mundo del vino a sorbos

Texto: Antonio Egido

Con algunas zonas del territorio español todavía por recoger algunas uvas que esperan su maduración completa en el campo, asistimos en nuestro buscador a la llamada de las valoraciones sobre lo que está resultando esta vendimia 2021, la primera tras la pandemia, que ofrece, según leemos, menos cantidad, pero aquellas uvas que han llegado a las bodegas, son de mayor calidad.

Así nos lo indican en ‘drinksco.es’ con el titular “Vendimia 2021: cosecha corta pero de calidad excepcional”, en un artículo firmado por Raúl Pérez del que entresacamos estas frases: “Estamos en temporada de vendimia, de recogimiento de los frutos de la vid para elaborar vino. Todas las zonas vinícolas se convierten en eje central de bodegas, productores y recolectores que trabajan a diario para ver cómo será la cosecha de este año.

Cada año por estas épocas se da una perspectiva global de lo que puede ser la temporada de vendimia del año. Una gran parte de las bodegas actuales han comenzado un poco antes la vendimia del año, y aunque la previsión es que este 2021 la cosecha será más corta de lo habitual, también es cierto que se prevé será una cosecha entre muy buena y excelente. Lo que es una gran noticia para todos.

Previsión de la vendimia 2021 en España

Las primeras previsiones para la campaña de vendimia 2021 pronostican una menor producción generalizada respecto al año pasado. Será de muy buena calidad, eso sí. Según el Consejo Sectorial vitivinícola de Cooperativas Agro-alimentarias de España la estimación de esta campaña es de unos 49 millones de Hl. Es una estimación inicial que puede variar según avance la vendimia y la climatología, por lo que estas cifras podrían sufrir alguna leve oscilación. La cosecha en todo caso será corta, entre un 15 % o 20 % menos según la zona de producción, por debajo de la media y 7 millones de hl menor que la campaña 2020 en la que tuvimos 46,5 millones de Hl.

El impacto de Filomena en el mes de enero, junto con algunas heladas de primavera y fuertes tormentas, han afectado a las regiones de Castilla-La Mancha, la mayor extensión de viñedo del mundo, y Extremadura, con una producción que rondará los 23-25 millones de hectolitros y una merma de un 15 % en la cosecha.

Por su lado, Rioja comenzó su vendimia a finales de agosto con la recogida de los primeros kilos de la variedad tempranillo blanco, una uva con un ciclo vegetativo más corto y por tanto una maduración más temprana. El resto de variedades blancas, como verdejo y viura, han necesitado unos días más para alcanzar su estado óptimo. Eso sí, la buena noticia es la excelente calidad de la uva, con la cantidad de azúcar idónea que producirá vinos de 12º. Uvas muy sanas en el viñedo, y que auguran caldos excelentes.

Si nos movemos al noreste, por ejemplo, en la Denominación de Origen Rías Baixas se ha calculado una vendimia de 43,7 millones de kilos de uvas, un 27 % más que en la cosecha de 2020, y hasta podría ser la mayor de la historia en esta D. O., superando la anterior marca de 41 millones de kilos de uva recogidos en 2011. Y eso que la inestabilidad meteorológica ha marcado este verano retrasando la maduración. Pero el estado sanitario de los viñedos está siendo muy bueno y se espera también una cosecha de calidad.

En Catalunya la vendimia también se prevé de gran calidad en la mayoría de las denominaciones de origen. A diferencia de la campaña del 2020 que estuvo muy afectada por la enfermedad del hongo mildiu, y que hizo descender el volumen de producción, esta campaña ha estado libre de enfermedades y plagas.

Las previsiones para la Denominación de Origen Jerez y Manzanilla de Sanlúcar de Barrameda, destacan un adelanto con respecto a otros años de la recogida de uva, que se encuentra en un equilibrio óptimo entre azúcar y acidez. Gracias al buen estdo sanitario y a una maduración suave se ha alcanzado un alto nivel de calidad de la uva.

La principal zona vinícola de la Comunitat Valenciana, Utiel-Requena, tiene una peor previsión. Se ha calculado una reducción del 40 % de las cosechas debido principalmente al impacto del pedrisco en los últimos meses. En Valencia, debido al ataque del hongo mildiu, se perderá más de un millón de kilos de uva. En cualquier caso los expertos ya vaticinan que, a pesar de todos los problemas, la calidad también será muy buena”.

En ‘agronewscastillayleon.com’ rebajan los hectolitros esperados atendiendo las indicaciones de la Interprofesional del Vino, y nos dicen que “La Interprofesional del Vino de España celebró el pasado 17 de septiembre su Junta Directiva, donde se puso en común la situación del sector con los datos de cierre de la campaña anterior y las previsiones de esta nueva cosecha. El arranque de la campaña vitivinícola 21/22 llega con buenas expectativas ante la aparente reactivación de los mercados que coincide con la llegada de una cosecha corta, con carácter general, en el hemisferio norte.

Los datos de cierre de campaña 2020/21 del INFOVI con la evolución de los últimos meses, en los que se ha producido un crecimiento a dos dígitos en exportación y una reactivación del mercado interior, permiten comenzar la nueva campaña con unas disponibilidades de vino inferiores en 2,7 millones de hl a las de hace 1 año. En cuanto a las previsiones de cosecha, OIVE junto a sus organizaciones coincidieron en prever una cosecha de buena calidad, pero más corta que el año pasado, que oscilará entre los 39 a 40 millones de hectolitros de vino y mosto, dependiendo de las condiciones meteorológicas de las próximas semanas de vendimia. No obstante, dada la diversidad de nuestro país, la disminución no será generalizada en todas las regiones. Este año, la viticultura en España ha tenido que afrontar episodios climatológicos extremos como los efectos de la sequía, DANAS, brotes de mildiu en algunas zonas e incluso incendios. Esta disminución también es extrapolable a nuestros más directos competidores, como es el caso de Francia (inferior en un 30 % respecto al año anterior) o Italia (inferior en un 9 %).

La evolución positiva de la pandemia en los últimos meses, debido al avance de la vacunación, ha influido en la reactivación de los mercados tanto en exportaciones como en consumo nacional y, además, está permitiendo que la vendimia se esté llevando a cabo sin incidencias epidemiológicas, gracias también a las medidas preventivas adoptadas.

En la reunión, se puso de relevancia la presencia de los contratos homologados de uva y vino promovidos por OIVE que, como novedad, este año tienen un carácter plurianual, buscando una mayor estabilidad para los operadores y la transparencia en la cadena. Por otro lado, se repasaron las actuaciones que está desarrollando OIVE siguiendo las líneas de actuación marcadas en su Extensión de Norma. Entre ellas, además de continuar con la promoción tanto nacional como internacional, se incidió en la publicación de diversos informes dentro de su línea de actuación de mejora de la información sectorial y se presentaron los primeros pasos para el desarrollo del plan estratégico sectorial en el que está trabajando OIVE, con el objetivo de valorizar nuestros productos”.

Una vendimia de la que, todavía, tenemos que esperar unas semanas para poder empezar a disfrutar los primeros vinos tintos, los del año, que saldrán al mercado en noviembre y que nos darán las claves finales de cómo ha sido la vendimia del 2021.

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