Tras superar su récord histórico el pasado año, en 2018 mantiene su apuesta por un servicio de calidad y por actividades culturales
A orillas del río Ebro y a 5 minutos caminando desde el centro histórico de Logroño, se encuentra Bodegas Franco-Españolas, una bodega familiar de la DOCa Rioja con 127 años de historia a sus espaldas y la 3ª generación de la familia Eguizábal al frente, que mantienen una clara apuesta por el enoturismo. A lo largo de todo el año realiza visitas guiadas, actividades personalizadas para grupos reducidos, catas comentadas, maridajes o gastronomía tradicional en su restaurante, que en 2017 se tradujeron en más de 40.000 visitas, un nuevo record para sus propuestas apoyadas en un servicio de calidad y valor añadido en sus experiencias enoturísticas.
Elena Pilo, responsable del departamento de enoturismo explica que “esperamos aumentar esta cifra en 2018 llegando a 45.000, gracias a las actividades personalizadas que nos permiten ofrecer el servicio de calidad que demanda nuestro público. En los últimos 5 años, hemos apostado por acercar la cultura del vino a nichos en los que hasta ahora resultaba complicado llegar. Impulsamos el talento joven y el enoturismo en familia, sin olvidar a los afianzados y fieles seguidores de nuestras dos grandes marcas, Bordón y Diamante”
Según explica la bodega en un comunicado, son las enoexperiencias, sus emblemáticos vinos y su enclave a orillas del río Ebro, a tan solo cinco minutos caminando del centro histórico de Logroño y de la conocida Calle Laurel, marcan los principales atractivos para el enoturista local, nacional e internacional.
Además, en su apuesta por la cultura, el arte y la música, organizando diversos eventos a lo largo del año, como el certamen ‘Teatro con Diamante’ que el próximo mes de abril celebrará su séptima edición; el ‘Cine de Verano’ en versión original, ambientado con música y vino, amenizará las tardes-noches de los jueves del mes de julio en los jardines de la bodega; la ‘Vendimia en Familia’ acercará a los más pequeños a la tradición de la recogida de la uva; el ‘VI Día de la Moda, Wine Fashion Market’ que se celebrará en el mes de noviembre, apuesta por jóvenes diseñadores; y los ‘Misterios de Hallowine’ pondrán el punto lúdico en los calados de la bodega a finales del mes de octubre. Además Bodegas Franco-Españolas, es anfitriona de los dos grandes festivales de música contemporánea, de ámbito internacional que se celebran en Logroño, ACTUAL, nada más comenzar el año, y MUWI (Festival de Música y Vino), en el mes de agosto.
En cuanto al perfil del visitante de Bodegas Franco-Españolas, la bodega afirma que es tan diverso como lo son las actividades sociales, lúdicas y culturales que ofrece. En 2017 se han registrado visitantes de más de 30 nacionalidades diferentes; hombres y mujeres de entre 30 y 70 años que asisten a las visitas, maridajes y catas tradicionales; jóvenes a partir de 24 años que acuden a los festivales y conciertos, o familias con niños, son algunos ejemplos.
Bodegas Franco-Españolas nace en 1890 como resultado de la unión entre Francia y España. La compañía de Anglada de Burdeos y sus socios españoles se unieron en un momento álgido en Rioja, cuando los franceses vinieron a la región tratando de reemplazar sus viñedos arrasados por la filoxera. Era el origen de los «vinos finos de Rioja».
Bordón y Diamante son sus vinos más emblemáticos y embajadores de la bodega en el mundo. 2 vinos de referencia internacional que no sólo representan a la bodega sino también a la Denominación de Origen Calificada Rioja. Las primeras añadas de ambas marcas se remontan a 1892.
Actualmente, de la producción total de vino, un 65% se destina a venta nacional y un 35% a exportación, cuyos principales mercados son: Mexico, Estados Unidos, Canadá, Dinamarca, Alemania y China.
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