9 vinos ‘de cosechero’ para conocer la vertiente más genuina de Rioja

Presentamos los vinos de la cosecha 2021 premiados en el último Concurso de Vinos de Cosechero de La Rioja celebrado con el patrocinio de la Fundación Caja Rioja – CaixaBank y bajo la dirección técnica de la revista La Prensa del Rioja

El Concurso de Vinos de Cosechero de La Rioja, organizado por la Fundación Caja Rioja y CaixaBank y bajo la dirección técnica de la revista La Prensa del Rioja, premia cada año un estilo de vinos que conforman la vertiente más genuina de los vinos de La Rioja, como son los tradicionalmente denominados ‘vinos de cosechero’, vinos que mantienen su proximidad al fruto, a la uva, a la tierra que cuidan los viticultores de La Rioja dotando de vitalidad al mundo rural.

En esta edición nº 32 del concurso, que por primera vez ha cambiado la fecha de realización de septiembre a junio, han participado un total de 41 bodegas de 24 localidades riojanas con 98 muestras todos los de la cosecha 2021, de gran calidad y un excelente nivel en los vinos que participaron

El objetivo del certamen es reconocer el excelente trabajo de los viticultores de La Rioja por mantener y elevar la calidad de los vinos edición tras edición, contribuyendo al desarrollo de la vida de los pueblos de la región y del sector vitivinícola y favoreciendo el conocimiento de la cultura de La Rioja reflejada de la manera más próxima en los vinos más jóvenes. Estos son los 9 vinos de la cosecha 2021 premiados en el Concurso celebrado los pasados 1 y 2 de junio.

VINOS BLANCOS

• Primer Premio: Florentius de Bodegas Florentino Martinez Rubio, en Cordovín. Antes de que Rioja emprendiera la renovación de sus vinos blancos, Florentius fue uno de los más destacados ejemplos del gran potencial de calidad de la zona del Alto Najerilla para obtener la máxima expresión de la variedad viura. En este caso se elabora acompañada por la variedad malvasía, ambas procedentes de los viñedos más antiguos de esta bodega familiar de Cordovín. Es un vino con aromas francos a frutas y flores blancas, vivo y fresco, muy meloso, equilibrado y muy complejo en sabores, así como con amplia y sabrosa persistencia.

• Segundo Premio: Muñarrate , de Bodega y Viñedos Solabal, en Ábalos. Los suelos arcillo calcáreos y altitud de la localidad de Ábalos, al pie de la Sierra de Cantabria, sumados a los 40 años del viñedo, permiten descubrir la auténtica personalidad de la variedad viura -complementada con un pequeño porcentaje de malvasía- y disfrutar de un blanco alegre, untuoso y con recuerdos de frutas cítricas. La vendimia se realizó de forma manual, en pequeños remolques de 1.500 kg, y la fermentación se llevó a cabo a temperatura controlada entre 14ºC y 17.5ºC durante tres semanas. El proceso finalizó manteniéndose con sus lías durante un mes para obtener mayor volumen en boca.

• Tercer Premio: Solana de Ramírez, de Bodegas Solana de Ramírez, en Ábalos. Sorprende que una pequeña localidad como Ábalos, tradicionalmente aupada al podio con sus vinos tintos de maceración carbónica, ocupe este año con sus vinos blancos dos de los primeros puestos del concurso. Solana de Ramírez es una bodega familiar que ha renovado sus instalaciones y cuenta con moderna tecnología de elaboración, factor de calidad importante en vinos blancos. El blanco premiado procede de viñedos propios de las variedades clásicas de Rioja viura y malvasía (85% y 15% respectivamente) y destaca en cata por su aroma fresco con recuerdos florales y frutales, especialmente cítricos, que le proporcionan igualmente frescura en el paso de boca, donde grado y acidez se presentan muy bien ensamblados.

VINOS ROSADOS/CLARETES

• Primer premio. Ilurce de Bodegas y Viñedos Ilurce, en Alfaro. Ilurce ha acreditado con su espectacular palmarés ser uno de los mejores rosados de Rioja. La alta calidad de este rosado es el resultado de un cuidadoso proceso de elaboración (vendimia manual, maceración en frío y sangrado, fermentación del mosto con levaduras autóctonas a baja temperatura…) con la particularidad de que no todos los años participan las mismas parcelas. “Ensamblamos garnachas de viñedos jóvenes con las de viñedos en vaso muy antiguos, seleccionando las que alcanzan plena maduración con el grado alcohólico más bajo”. En cata tiene un alegre color rosa frambuesa, con aromas a fruta roja fresca y golosinas, amplio en boca, muy afrutado, fresco y muy sabroso.

• Segundo premio. Real Agrado, de Viñedos de Alfaro, en Aldeanueva de Ebro. Procedente de uvas de la variedad garnacha cultivada en los suelos aluviales característicos del valle del Ebro en la localidad más oriental de la Denominación, Alfaro, de donde toma su nombre la bodega fundada en 1970. La elaboración sigue el método tradicional de los rosados, manteniéndose el mosto y las pieles de las uvas en contacto unas 6 horas antes del sangrado por gravedad. En cata presenta un delicado color rosa pálido, vivo, limpio y brillante. Aromas de frutos rojos, frambuesa y sandía con un toque cítrico. Muy ensamblado, sensaciones de fresa, sandía y granada. Suave, sutil, refrescante y goloso con marcada salida.

• Tercer premio. Cantoblanco, de Bodega Nuestra Señora de Vico, en Arnedo. Parecía un tópico que había pasado a la historia, como otros tantos en Rioja, pero en esta edición del concurso ha sido clara la primacía de la Rioja Oriental con sus vinos rosados, que han acaparado el podio. Cantoblanco rosado es un vino elaborado a partir de uvas tintas de la variedad garnacha cultivadas a una altitud entre 550 y 700 m, siguiendo el clásico proceso de maceración con los hollejos (12 horas), sangrado de los frutos y fermentación a temperatura controlada para preservar toda la complejidad aromática de la uva.

TINTOS

• Primer premio: Pérez Urrecho, de Bodegas y Viñedos Pérez de Urrecho, en Galbárruri. Elaborado con uvas de la variedad tempranillo vendimiadas manualmente de viñedos propios en Rioja Alta, Pérez Urrecho es un vino tradicional de maceración carbónica. De hecho, es una de las pocas bodegas que continua con la tradición del pisado de la uva, como se ha venido haciendo desde antiguo. En cata presenta un color rojo picota con reflejos violaceos, limpio y brillante. Destaca su aroma a fruta roja silvestre, acompañada de notas de regaliz. En boca resulta suave con un ligero carbónico que refresca la boca acentuando los sabores de frutas rojas. Resulta un vino redondo, equilibrado con un largo final en boca.

• Segundo premio: Chirimendo de Bodegas Castillo de Mendoza, en San Vicente de la Sonsierra. Este tinto joven, cuya selecta producción es de apenas 5.000 botellas, es un fijo en el podio del Concurso de Cosecheros y uno de los pocos que llevan el marchamo de Agricultura Ecológica. Procede de viñedos propios de las variedades tempranillo (85%) y viura (15%) del entorno de San Vicente de La Sonsierra, vendimiadas manualmente y seleccionadas en mesa de clasificación. Elaborado por el tradicional método de maceración carbónica típico de Rioja, presenta en cata un color violáceo intenso, nariz persistente en la que predominan los aromas frutales a moras, fresas, plátanos y arándanos con evocaciones de flores azules como las violetas y la lavanda, y amable, pleno, fresco y equilibrado con un final aromático persistente de carácter de nuevo muy frutal.

• Tercer premio: Deóbriga, de Bodegas Ramón de Ayala Lete e Hijos, en Briñas. Los orígenes de la bodega Ramón Ayala Lete e Hijos datan de 1853, cuando Tomás de Ayala adquirió en Briñas una casona de piedra de sillería, provista de patio, granero y bodega con calados centenarios tallados en piedra. El nieto de Tomás, Ramón de Ayala, acondiciona y transforma en 1970 parte de la casona en un rústico y bonito restaurante. Deóbriga maceración carbónica 2021 se encuadra en la gama de ’vinos de autor’ de la bodega y presenta en cata un color rojo picota intenso de capa alta, aromas de fresa con intensidad frutal muy alta y paso fresco y frutal, muy goloso, en boca, con buena estructura.

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