Las investigaciones desarrolladas sobre el sector vitivinícola riojano ocupan un lugar destacado en la exposición ‘La vid, el vino y el CSIC’, abierta al público hasta el 31 de diciembre en el Real Jardín Botánico de Madrid. Esta exposición pionera repasa dos siglos de investigaciones del CSIC en torno a la vid y el vino en más de 100 paneles informativos que detallan con imágenes los principales estudios de 29 centros del CSIC participantes, desde un punto de vista multidisciplinar. La muestra evidencia la trascendencia del vino y la vid como parte de la singularidad de España desde la antigüedad hasta nuestros días y su influencia en la economía, en la cultura, la gastronomía y en las ciencias experimentales.

 

El peso de La Rioja en la exposición queda patente a través de casi una veintena de paneles. En primer lugar, por el recuerdo al riojano Mariano de la Paz Graells, que impulsó en el siglo XIX los estudios para erradicar la filoxera, pero sobre todo con la presencia de los trabajos llevados a cabo por investigadores del Instituto de Ciencias de la Vid y del Vino, en Logroño. Destacan, por un lado, los trabajos del grupo de investigación VITIGEN, dirigido por José Miguel Martínez Zapater, centrados en genómica y biotecnología de la vid. Este grupo desarrollado un sistema de identificación único que utiliza 48 marcadores de ADN conocidos como SNP. Esto le ha permitido analizar más de 9.000 muestras de vid procedentes de 15 países, construyendo una base de datos con más de 2.400 genotipos. Cuentan con una importante colección de variedades de vid.

Por otra parte, en este mismo centro, sobresale también el grupo MICROWINE, que dirige Ramón González y cuyas investigaciones giran en torno a la microbiología del vino, fundamentalmente en el estudio de las levaduras, tanto salvajes como modificadas genéticamente, en el vino y en el cava. Algunas de las levaduras seleccionadas por este grupo están patentadas y se comercializan con gran éxito.

Desde otros centros del CSIC, ubicados en distintos puntos de España, también se han desarrollado o se están llevando a cabo en la actualidad, numerosos trabajos que tienen como objeto de estudio la zona vitivinícola de La Rioja y que están presentes en la exposición.

Es el caso de los trabajos llevados a cabo por Teodoro Lasanta, del Instituto Pirenaico de Ecología (IPE-CSIC), sobre el viñedo como un recurso paisajístico, la erosión del suelo del viñedo, o el comercio del vino en Rioja en las últimas décadas.

También están presentes los trabajos de Sonia Rodríguez, del Instituto de Recursos Naturales y Agrobiología de Salamanca (IRNASA), sobre la modificación de suelos de viñedo de La Rioja con residuos postcultivo de champiñones, para inmovilizar los pesticidas detectados en los suelos así como la repercusión que esto pueda tener en las aguas subterráneas.

El CSIC, que genera el 20% de la producción científica nacional, es la institución con mayor porcentaje de transferencia de resultados al tejido productivo.