Es un vino que nace de un viñedo viejo, situado entre montañas a una altitud de 600 metros en el que las cepas crecen libremente entre árboles frutales
Guardacumbres es el resultado de un ambicioso proyecto de los Hermanos Hernáiz. Es un vino de alta gama fruto de la recuperación de patrimonio vitivinícola de Rioja Alta que se ha ido gestando a lo largo de casi una década en un viñedo que estaba a punto de desaparecer.
Nace de un viñedo viejo, situado entre montañas a una altitud de 600 metros en el que las cepas crecen libremente entre árboles frutales. Allí se intercalan aleatoriamente las distintas variedades de uva -Tempranillo, Garnacha, Graciano, Calagraño y Viura-, como era habitual encontrar antiguamente en los viñedos de la región. La parcela se gestiona además con prácticas de viticultura sostenible y regenerativa.
Guardacumbres tinto 2022 y Guardacumbres blanco 2023 son vinos que muestran la máxima expresión del carácter e identidad del viñedo y del terruño. El tinto es ligero, aromático y frutal, con taninos dulces y suaves. Destaca por su finura y equilibrio, con notas acarameladas y frutos rojos silvestres. Listo para disfrutar sin necesidad de envejecimiento. El blanco es fresco y complejo, reflejo de un viñedo viejo en zona fresca. Presenta notas de cítricos, fondo balsámico y toques de vainilla y panadería por su crianza sobre lías. Retrogusto largo con matices de hinojo y miel.