El 2015 será el primer año desde el inicio de la crisis con crecimientos en el sector hostelero, una recuperación que impulsará las ventas de vinos y referencias “premium”, según estiman las grandes bodegas, mientras que las vinotecas también auguran “más alegría” para esta Navidad. Pernod Ricard, Torres, Codorníu, Matarromera, Protos o González Byass son ejemplos de firmas líderes que mejoran sus expectativas. Algunas de ellas acumulan crecimientos de ventas de doble dígito, que esperan “endulzar” con las últimas salidas navideñas, época de la que dependerá un elevado porcentaje de su facturación anual.
Texto: EFEAGRO / Ginés Mena
El Grupo Matarromera crece en torno al 15 % en facturación de enero a octubre respecto al mismo período del año anterior y mejora márgenes gracias a la venta de referencias de mayor precio, destaca a Efeagro su director general comercial, Javier Cornadó. La hostelería responde y hay “más ganas de gastar”, añade. Mientras tanto, Philippe Ortega, director general de marketing de Pernod Ricard Bodegas, detalla que la campaña Navidad es clave, ya que representa un 30 % de todas las ventas anuales en volumen. “Nuestra previsión es de un crecimiento del 10 % tanto en volumen como en valor”, explica el directivo. ”Estamos creciendo en volumen y en valor -prosigue- en especial con nuestras marcas estratégicas (Campo Viejo y Azpilicueta)”. “Vemos una tendencia de crecimiento de las categorías superiores. En el sector aumenta el consumo de vinos orgánicos y espumosos”, argumenta, por su parte, en parecido sentido, Miguel Torres Maczassek, director general del grupo catalán Bodegas Torres. ”La campaña de Navidad es clave para nosotros, al ser uno de los momentos más intensos en la venta de vinos y brandy”, detalla Maczassek. Para el cierre de 2015, “creceremos ligeramente en valor respecto a 2014″, gracias a que el consumo en gran distribución “se mantiene en positivo” y la expectativa en la restauración es de crecimiento”.
“Las mejores noticias” pueden venir de la hostelería, resume el director del Observatorio del Mercado del Vino, Rafael Del Rey. “Aunque caiga un poquito el consumo en el hogar, si repuntan las ventas en bares y restaurantes y se recupera también la venta directa y para regalos, aspiraríamos a tener un final de año muy estable y quizás con un ligero crecimiento”, concluye.