Los expertos destacaron las ventajas que una producción sostenible puede aportar en los mercados internacionales ante la sensibilización del consumidor
“Viticultura y enología sostenible. Valor añadido y diferenciación en el mercado” era el título de la II Jornada DIAM que reunió el 17 de marzo en Logroño a un centenar de profesionales de la enología y viticultura de Rioja. Esta II Jornada DIAM, que contó con la colaboración de la Asociación de Enólogos de Rioja, fue inaugurada por el Director General de Calidad, Investigación Agroalimentaria y Desarrollo Rural de La Rioja, Pedro Manuel Sáez Rojo, y clausurada por el presidente del Consejo Regulador de Rioja, Víctor Pascual. El objetivo de la jornada fue mostrar a las bodegas de Rioja las ventajas que una producción sostenible puede aportar en los mercados internacionales.
Emilio González, Director de la Asociación Española de Agricultura de Conservación. Suelos Vivos (AEAC-SV) en su conferencia titulada “Agricultura sostenible, compromiso de éxito y futuro” planteó las claves para llevar a cabo una agricultura sostenible en el marco de la Unión Europea y las aportaciones de la agricultura de conservación y de precisión, así como la necesidad de usar las cubiertas vegetales en el viñedo para obtener beneficios medioambientales en relación al freno de la erosión, lucha contra la desertificación y mejora de la calidad de aguas que se filtran en la tierra. Emilio González presentó el proyecto LIFE Agricarbon, que nace con el fin de favorecer la progresiva implantación de técnicas agrarias sostenibles y la adaptación del sistema agrario a los nuevos condicionantes climáticos que se den con el calentamiento global.
Esperanza López Ubis, Técnico en Agricultura Ecológica del Centro de Investigación de Desarrollo Agrario de La Rioja, expuso cuestiones como la inspección y certificación como requisitos indispensables para abrir nuevos mercados en su intervención titulada “Agricultura ecológica-productos bio. Certificaciones y mercados”. Recordó que el Reglamento (CE) 834/2007, que entró en vigor el 1 de enero de 2009, regula la producción agraria ecológica en Europa e incluye el vino y que ya no se hablará de vino producido con uvas ecológicas sino de vino ecológico. Tanto la producción de uvas como la elaboración del vino deben ser certificadas por Autoridades de Control públicas u organismos privados que realizan un seguimiento para garantizar la trazabilidad y su carácter ecológico. Destacó también que algunos países exigen certificar en base a sus stándares para poder importar vino procedente de uvas ecológicas. Es el caso del NOP (EEUU), JASS (Japón), Soil Association (Reino Unido), Biosuisse (Suiza) y Canadá, además de stándares privados como BRC y GLOBALGAP.
De “Sostenibilidad y valor añadido: impacto en la comercialización” habló Vinyet Almirall, Directora de Comunicación del Grupo Torres, que expuso el modelo de sostenibilidad de Bodegas Torres como referencia de una producción sostenible. Desde hace 30 años, la bodega realiza una viticultura respetuosa con el medio ambiente, utilizando alternativas biológicas y evitando pesticidas y herbicidas. Además esta implicación en la preservación del entorno se manifiesta en una política medioambiental y estrategias frente al cambio climático con actuaciones como el uso de energías renovables; reducción de emisiones de CO2 a través de un proyecto con algas, aislamiento de depósitos, vehículos eléctricos, vehículos híbridos, reforestación de bosques; y estrategias sostenibles en el viñedo … Vinyet Almirall destacó el prestigio que éste compromiso aporta a la bodega en términos de imagen, comunicación y valor añadido.
Margarethe Chapelle, Morphocristallisateur del Laboratorio Thiollet (Francia) bajo el título “El método de cristalización” presentó esta técnica que permite un análisis cualitativo de las fuerzas de vida procedentes de un organismo viviente. Es un método para apreciar la vitalidad de un alimento y una de las pocas técnicas que permiten distinguir su forma de cultivo, aportando pistas sobre manipulaciones o transformaciones que ha sufrido y las deficiencias o enfermedades del cultivo en cuestión. Este método de análisis tiene la capacidad de detección de un producto sano resaltando el equilibrio o el desequilibrio de la sustancia probada. En su intervención, la experta francesa destacó que las cristalizaciones que ha realizado sobre los tapones DIAM muestran que están completamente libres de TCA.
La jornada finalizó con una cata de 5 vinos orgánicos internacionales tapados con DIAM dirigida por Antonio Tomás Palacios García, Profesor de cata de la Universidad de La Rioja y Director de Laboratorios Excell Ibérica S.L.
Diam, el corcho reinventado
DIAM es un tapón de corcho neutro que protege sin alteración el frescor y la esencia de los aromas del vino. En su proceso de fabricación tiene un buen balance de carbono. La empresa está muy comprometida con el control de sus emisiones de CO2 y gracias a los esfuerzos realizados tanto en el balance energético como en el balance de la materia, el Bilan Carbone® global de DIAM disminuyó el 12% y sigue manteniendo su planteamiento de mejora continua.
DIAM es un tapón a base de granulado fino de corcho garantizado exento de gusto a corcho y que además ofrece permeabilidades al oxígeno adecuadas para la buena conservación de su vino. El corcho de los tapones DIAM es tratado y liberado del TCA (molécula causante del sabor a corcho) y de otras muchas moléculas que generan las desviaciones sensoriales. Controles rigurosos en todas las etapas de producción permiten que DIAM sea actualmente el único tapón de corcho garantizado unitariamente sin TCA cedible (≤ al límite de cuantificación 0,5 ng/l). La pureza y la neutralidad sensorial de DIAM le permiten preservar todas las notas afrutadas de los vinos.