Espiroflex amplía su gama de productos para el sector vitivinícola con la nueva herramienta que facilita el arrastre, el transporte y reduce el tiempo de las tareas de los operarios
Apostar por el trabajo eficiente y productivo conlleva la necesidad imperativa de mantenerse a la vanguardia de las innovaciones tecnológicas con las que poder seguir el ritmo a las nuevas tendencias y desafíos del sector. En este contexto, la empresa española Espiroflex, reconocida por su liderazgo en la fabricación de mangueras técnicas, presenta la ampliación de su catálogo con el lanzamiento de una nueva línea destinada a las bodegas: la ESPIROWINE SLIDER. Esta manguera de PVC incorpora una tecnología deslizante en su capa externa que facilita el arrastre y transporte, haciendo más eficiente el trabajo de los operarios en las instalaciones vinícolas. «El diseño de la ESPIROWINE SLIDER permite un manejo mucho más ágil y ligero para el operario, reduciendo el esfuerzo y el tiempo necesarios en las tareas diarias de la bodega», indica Bruno Sánchez Page director adjunto de Espiroflex.
Espiroflex alcanza su distinción, no solo por su capacidad de innovación, sino también por el cumplimiento de rigurosas normas de calidad, de manera que sus mangueras cuentan con todas las certificaciones europeas pertinentes. Además, son resistentes a los simulantes alimentarios D1 y D2, y están fabricadas con materiales libres de ftalatos. «Nos aseguramos de que nuestros productos no solo cumplan con los estándares de calidad, sino que también protejan la excelencia de los vinos durante el proceso de fabricación», explica el director adjunto de Espiroflex.
Control total sobre los procesos y estándares de calidad
La empresa consolida su compromiso con el avance técnico a través de su inversión en investigación y desarrollo, alzándose como un referente en el sector. «Nuestra continua inversión en I+D y nuestra avanzada tecnología nos permiten ofrecer productos que son sinónimo de calidad y garantía», destaca Bruno Sánchez Page. Esta filosofía se refleja en su producción, ya que son los únicos fabricantes que internalizan y producen su propia materia prima, asegurando así un control total sobre los procesos y estándares de calidad.
Con sede en Barcelona y centros de producción en la República Checa y Egipto, Espiroflex fabrica más de 75 millones de metros de mangueras anualmente y factura más de 50 millones de euros. Su distribución abarca más de 50 países, lo que refuerza su posición como líder europeo en el sector. La empresa también ofrece una amplia gama de mangueras de caucho y accesorios técnicos para la industria alimentaria.
Para esta empresa de origen familiar, uno de los principales retos es proyectar la marca España a nivel mundial y continuar apoyando a la distribución e industria nacional. «Nuestro objetivo es seguir acercándonos a nuestros clientes y mantenernos como referentes en el mundo de las mangueras».
Más información en www.espiroflex.com
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