La Inteligencia Artificial (IA) y las tecnologías están redefiniendo la industria vinícola, proporcionando herramientas avanzadas para optimizar y mejorar la producción de vino. La integración de estos sistemas promete un futuro donde la precisión y la calidad sean las características distintivas de la producción vinícola. Aunque estas innovaciones se han popularizado recientemente, su aplicación en el sector lleva décadas produciéndose, consolidando a las redes neuronales y la IA como herramientas fundamentales en diversas áreas. “Estas tecnologías mejoran las condiciones y la calidad del trabajo humano, actuando como colaboradores eficientes y precisos», explica el asesor técnico enológico de Parsec, José Ignacio Hernández.

La IA y su aplicación en las bodegas

En la industria vinícola, las herramientas de IA se utilizan comúnmente para monitorear los parámetros en tiempo real durante procesos clave como la fermentación alcohólica, la evaluación de uvas y mostos, la extracción de color y la segunda fermentación de vinos espumosos. Los sensores recogen datos sobre temperatura, densidad, CO2, oxígeno disuelto, azúcares, compuestos fenólicos y antocianinas, proporcionando información valiosa sobre la evolución de estos procesos. «Los datos almacenados alimentan algoritmos de aprendizaje automático y modelos predictivos, anticipando problemas de fermentación y optimizando la combinación de insumos», explica José Ignacio Hernández . Además, la IA juega un papel crucial en la prevención del riesgo oxidativo, midiendo parámetros críticos relacionados con la exposición al aire y ajustando los procesos de manipulación del vino. 

SAEN5000: IA en la bodega con 20 años de antelación

De la mano con la tendencia imparable del desarrollo tecnológico, Parsec presenta  el sistema SAEN5000, uno de sus proyectos más avanzados para el sector. Esta solución de supervisión multiparámetro y multiproceso, procesa datos en tiempo real integrando tecnología de microprocesadores, sensores y automatización, y mejorando con ello la calidad y eficiencia de las operaciones en las bodegas. Por ejemplo, el sistema ADCF monitoriza la cinética de fermentación, proporcionando información integrada sobre el progreso y ajustando automáticamente parámetros como la oxigenación y los nutrientes.

Además, la plataforma Quadr@ de Parsec permite combinar el control integrado de procesos y la trazabilidad en bodega. Este software dialoga con todos los sistemas y equipos de la bodega, recopilando datos y transformándolos en información utilizable, permitiendo a los productores mantener un control exhaustivo sobre todas las etapas del proceso vinícola.

Proyecto WineSens: control asegurado a través de la IA

En colaboración con la Universidad de Pisa y la Scuola Superiore Sant’Anna, Parsec ha desarrollado el proyecto WineSens, un sistema de control del proceso de elaboración del vino mediante IA y sensores avanzados. Este sistema de apoyo a la toma de decisiones ayuda a los enólogos a decidir la trayectoria enológica a seguir. Utilizando sensores como la nariz electrónica y la espectroscopia NIR, el sistema analiza compuestos volátiles y polifenólicos en tiempo real, proporcionando una «huella dactilar» de los procesos enológicos.

Los resultados preliminares del proyecto sugieren que la combinación de sensores calibrados y modelos entrenados puede monitorizar y predecir la cinética de la fermentación y la calidad del vino. «Esto podría revolucionar la enología, permitiendo un control preciso y exhaustivo del proceso de fermentación en tiempo real», destaca Hernández.

Descubre más sobre las soluciones de Parsec en https://www.parsecsrl.net/es/

 

 

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