En su almacén en Rioja, la empresa de distribución mantiene un amplio stock de botellas OI para dar servicio a pequeñas bodegas y producciones limitadas

Desde que el pasado otoño saltara la alarma en el sector del vino por los problemas que advertían las bodegas para abastecerse de algunas materias primas para el empaquetado, bodegueros, fabricantes y distribuidores sufren en mayor o menor medida retrasos en las entregas y problemas de la cadena de suministro de accesorios y equipamientos.

Jarica, empresa de reconocido prestigio en el almacenaje de corchos y botellas y con más de 35 años dentro del sector vitivinícola, apostó en 2017 por instalar un almacén de stock en Rioja. De esta forma la empresa podía garantizar un servicio `premium’ a los pequeñas bodegas o producciones limitadas de vinos especiales. Así “podemos servir pequeñas cantidades de distintos modelos y asegurar suministro durante todo el año”, explica Ricardo Santos, gerente de la empresa.

“Hemos planteado una empresa con ánimo de servicio y seguridad en el suministro. La idea es poder ofrecer con rapidez distintos modelos de botellas competitivos en relación calidad/precio”.  Según Santos, vieron la oportunidad de satisfacer así demanda de suministros en pequeñas cantidades de botellas “de una manera rápida y sencilla, sin necesidad de tener que contratar transportes de grupaje en las plantas de origen para conseguirlas”.

Ricardo Santos aclara que “aunque dentro del catálogo de OI podemos conseguir todos los modelos que fabrica la compañía, nosotros no trabajamos las botellas estándares de gran consumo, sino con botellas singulares. Actualmente estamos trabajando una serie de modelos que tienen gran aceptación y rotación y podemos ampliarlo a otros modelos dentro de nuestro catálogo”.

Como pieza clave en su vocación de servicio y de facilitar el suministro “si un cliente muestra interés por algún modelo, puede asegurarse el suministro manteniéndolo en nuestro almacén para su comodidad y utilizarlo en los próximos meses, según su necesidad”

En cuanto a los plazos de entrega, “en las botellas que más estamos trabajando el suministro es seguido”. La crisis de suministros comenzó antes de la guerra de Ucrania y aunque “en este momento hay un gran colapso y sin previsiones en las vidrieras es difícil asegurar el suministro, creemos que debería regularizarse a lo largo del año. Nosotros, basándonos en nuestras ventas y con previsiones de consumo para varios meses, mantenemos en un amplio stock para dar servicio a los clientes. Intentamos prever el consumo de varios meses”, apunta Ricardo Santos.

Jarica es también distribuidor para Rioja de DIAM, tapones de corcho tecnológico para vinos tranquilos, espumosos y espirituosos.

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