Lafitte apuesta por tecnología, innovación y su trayectoria para asegurar productos sin defectos y ofrecer resultados sensoriales impecables
Como empresa familiar con raíces que se remontan a 1918, Lafitte honra la tradición “mientras se mantiene en constante evolución, impulsada por la pasión por el corcho y el vino. Los tapones técnicos de Lafitte son una prueba tangible de este compromiso”, explica Ana Lample Reigada, Directora Comercial de España.
Por ejemplo, el tapón de corcho microaglomerado HIT, diseñado especialmente para vinos tranquilos y creado mediante un sistema de moldeado individual, ”ha demostrado ofrecer resultados organolépticos incomparables” afirma Lample. Estos tapones HIT se desarrollan a partir de una formulación equilibrada que utiliza microesferas de calidad alimentaria, “lo cual garantiza excelentes propiedades mecánicas y físicas, además de minimizar la tasa de transmisión de oxígeno en la botella a través del tapón, preservando así la integridad del vino”.
El proceso comienza con un riguroso control del origen del corcho, que se complementa con el exclusivo sistema MaxClean, un sistema de esterilización y desodorización en dos fases. “Este proceso combina presión, vapor seco, temperatura y tiempo para producir gránulos de corcho libres de cualquier aroma indeseado, lo que asegura una elevada neutralidad sensorial, respetando al máximo el perfil del vino y su evolución en la botella”.
Además, con su tecnología PerfectGo, Lafitte garantiza esta misma neutralidad en los tapones de corcho natural. “PerfectGo permite un análisis individual no invasivo de cada tapón, midiendo el nivel de neutralidad organoléptica de manera precisa. Esta combinación de tecnología avanzada y las cualidades naturales del corcho asegura una experiencia impecable al abrir una botella de vino de alta calidad” apunta Ana Lample.
Innovación y la calidad
Lafitte se distingue en la industria “por su dedicación a la innovación y la calidad, fusionando conocimientos generacionales con el diseño de procesos y equipos avanzados para asegurar productos sin defectos” asegura su Directora Comercial. Cada fase de producción se lleva a cabo internamente, donde se aplican rigurosos estándares de calidad en cada etapa, utilizando técnicas avanzadas de prueba y medición. Esto permite a Lafitte supervisar minuciosamente cada fase de producción, “evaluando el corcho en varias etapas para asegurar que esté libre de aromas no deseados, desde la corteza en bruto hasta el granulado y el tapón final, todo bajo el control del laboratorio interno de calidad”.
Este laboratorio interno también evalúa cada lote en términos de densidad, fuerza de extracción, tasa de transferencia de oxígeno y capacidad de sellado, entre otros aspectos, para garantizar que cada tapón cumple con los requisitos específicos de los clientes. Además, Lafitte “colabora con laboratorios externos, lo que refuerza su compromiso de ofrecer resultados sensoriales impecables”.
Gracias a una estricta política de control de calidad, Lafitte garantiza la trazabilidad completa de cada lote, proporcionando a sus clientes un nivel adicional de seguridad. “Este compromiso, junto con el uso de tecnología avanzada y la constante búsqueda de la excelencia, nos posiciona como un líder en la industria”.
Su oferta incluye tapones de corcho natural para vinos tranquilos, tapones especializados para espumosos, tapones cabezudos para licores y espirituosos, así como una amplia gama de cápsulas para todo tipo de bebidas. De este modo, ”Lafitte se convierte en el aliado ideal para las bodegas que valoran la excelencia, la fiabilidad y un enfoque sostenible en cada aspecto de su producción” concluye Lample.
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