La empresa corchera ha enfocado toda su estrategia para ser referentes en innovación sostenible
El compromiso con el medio ambiente ha formado parte de la cultura de J·Vigas desde sus inicios, aunque las anteriores generaciones no fueran conscientes de ello. Todo el sector corchero es sostenible por naturaleza, ya que contribuye a la preservación de los bosques y la fauna ibérica, es una industria local y el proceso de producción es altamente eficiente.
Partiendo de esta base, la actual generación de la familia Vigas al mando de la empresa, ha querido ir un paso más allá, integrando la sostenibilidad en el núcleo central de la estrategia empresarial, junto con la innovación. Por ese motivo, todos los departamentos tienen como objetivo trabajar para ser lo más sostenibles posible. Especialmente desde el departamento técnico, que hoy en día se ha convertido en el Departamento de Sostenibilidad e Innovación, ya que todos los proyectos actuales de I+D+i están enfocados a mejorar el producto siempre con la mirada puesta en un mayor cuidado medioambiental.
ISO 14001 y Huella de Carbono
Un hito del nuevo Departamento de Sostenibilidad ha sido la obtención de la certificación internacional ISO 14001 de Gestión Ambiental. Asimismo, ha impulsado un proyecto de investigación, junto con el ICSuro y ReMa Ingeniería, para calcular la huella de carbono de sus tapones desde los bosques hasta el final de su vida útil.
Además, recientemente, esta empresa corchera fundada en 1887, preguntó a sus clientes de España, Francia e Italia su opinión acerca de la sostenibilidad de la organización. Los más de 100 encuestados la valoraron con un 8,9 sobre 10. Para para J·Vigas, ese es, sin duda, el mejor reconocimiento e incentivo para seguir creando políticas sostenibles.
Nuevo cromatógrafo SPME Arrow – GC Intuvo – MS/MS
En materia de innovación, la empresa especializada en tapones de corcho natural de alta calidad, ha adquirido un nuevo cromatógrafo SPME Arrow – GC Intuvo – MS/MS que proporciona un control preciso y rápido y permite garantizar, no sólo la ausencia de haloanisoles en sus productos, sino también cualquier desvío sensorial de una manera efectiva y ágil, siendo este uno de los temas que más preocupa a las bodegas.