"El impacto de nuestros trabajos radica en que han servido para avanzar en el modelado de complejos entre proteínas y han ayudado a entender mejor numerosos sistemas biológicos de interés en biomedicina y biotecnología”.

Es uno de los 5 investigadores del ICVV que forman parte del ‘Ranking of World Scientists’, elaborado por la Universidad de Stanford de Estados Unidos

Texto: Antonio Egido

Juan Fernández Recio, tras doctorarse en Ciencias Químicas por la Universidad de Zaragoza en 1999, estuvo 5 años y medio haciendo investigación postdoctoral, primero en el Scripps Research Institute, San Diego (California), y después en Cambridge (Reino Unido), con una beca Marie Curie. En 2004 empezó a trabajar con su propio grupo de investigación en Bioinformática estructural en el IRBB (Instituto de Investigación Biomédica de Barcelona), gracias a una ayuda del programa Ramón y Cajal, y seguidamente se incorporó al BSC (Barcelona Supercomputing Center – Centro Nacional de Supercomputación). En 2017 obtuvo una plaza de Científico Titular en el CSIC, en el Instituto de Biología Molecular de Barcelona, y en 2019 se trasladó al Instituto de Ciencias de la Vid y del Vino (ICVV), donde permanece “con el reto de empezar una nueva línea de investigación en Bioinformática estructural aplicada a las ciencias del vino para poder contribuir, con los métodos de investigación básica previamente desarrollados, a resolver problemas prácticos de interés en el sector del vino. Juan Fernández Recio forma parte del ‘Ranking of World Scientists’, elaborado por la Universidad de Stanford de Estados Unidos, y publicado en la prestigiosa revista ‘Plos Biology’. Los autores de la publicación han elaborado un ranking a partir de un exhaustivo análisis que ha tenido en cuenta más de 40 factores diferentes, en el que incluyen a un grupo formado por tan solo el 2 % de los científicos de todo el mundo, que tienen la mayor influencia a nivel internacional porque sus publicaciones son las más referenciadas hasta mediados del año 2020. Una distinción que para el investigador supone “una satisfacción el saber que la investigación que uno hace tiene interés para otros investigadores, pero tampoco ha sido una sorpresa total, porque normalmente conocemos el impacto de nuestro trabajo debido a que estamos sometidos a evaluación constante, para proyectos, becas, etc.”.

Actualmente el trabajo de Juan Fernández Recio se centra en el desarrollo de modelos computacionales para entender los mecanismos biológicos a nivel molecular. En especial, “nos interesa conocer mejor cómo interaccionan entre sí las proteínas y otras moléculas de interés biológico. Los métodos que hemos desarrollado en nuestro grupo de investigación han sido pioneros en ciertos aspectos técnicos que les han dotado de una gran capacidad predictiva, como la descripción de la energía de desolvatación en la formación de complejos. El impacto de nuestros trabajos radica en que han servido para avanzar en el modelado de complejos entre proteínas y han ayudado a entender mejor numerosos sistemas biológicos de interés en biomedicina y biotecnología”.

La aplicación de estos métodos, que son todo un reto, supondrán para el sector del vino la solución a problemas relevantes “y de forma más inmediata, estamos tratando de conocer mejor los mecanismos moleculares de la percepción gustativa, que tiene interés, no solo por entender las cualidades sensoriales del vino en función de su composición, sino porque nos ayudará a poder interpretar variantes genéticas que predisponen a enfermedades relacionadas con nutrición y dieta”, indica Juan Fernández Recio.

Si bien no deja de mostrar sus dudas sobre la investigación en este país pues “lamentablemente, la ciencia en España arrastra una serie de problemas seculares, como la falta de inversión, o la precarización laboral. Afortunadamente, estas carencias se suplen con una extraordinaria dedicación y motivación de los investigadores. Pienso que en el campo del vino estamos muy bien posicionados a nivel internacional, con centros como el ICVV, donde se hace investigación en ciencias de la vid y del vino desde una perspectiva multidisciplinar, que es fundamental para liderar la respuesta a los grandes retos del sector en los próximos años, como el cambio climático, nuevas variedades, importancia del vino y estilo de vida en la salud, etc.”.

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