El mundo del vino a sorbos

El domingo, 21 de junio entramos en la nueva estación del verano, por lo que se nos ha ocurrido pedir a nuestro buscador que nos de resultados a la combinación de las palabras ‘vino y verano’, siendo las respuestas, realmente satisfactorias.

Texto: Antonio Egido

 

Pues no debemos ocultar que si bien existe un vino para cada momento, cada vino tiene también su protagonismo a lo largo del año. Así el primer enlace que encontramos en Internet nos lleva a ‘vino-españa.es’ donde con el titular de “Los vinos para este verano”, leemos el siguiente texto: “Ya queda muy poquito para entrar en la temporada de verano, aunque en muchas localidades el calor ya aprieta y a la hora de consumir y disfrutar del vino, el cuerpo muchas veces pide un caldo más fresquito, ya sea un vino blanco o un vino rosado, el vino tinto si está bien conservado en una buena cava y en su temperatura optima también son agradables de beber, aunque los recomiendo más para el final de la tarde o bien entrada la noche.

Para nada hace falta decir que los vinos blancos y  vinos rosados se deben servir a una temperatura de entre 9-12º C dependiendo si es un vino joven (10º C) o fermentado en barrica (12º C), en una cubitera con agua bien fría para que conserve la temperatura óptima, quien no ha sufrido nunca en sus carnes el ir a un restaurante de una gran superficie, centro comercial o incluso en la costa me ha pasado alguna vez, que sirven el vino y no está en una temperatura ideal y que ni si quiera te ponen o te ofrecen la posibilidad de enfriarlo, ante esta situación, no tengáis nunca ningún reparo al exigirlo al camarero, ya que debemos disfrutar plenamente del buen vino”. Obviamente el texto termina dando una serie de recomendaciones de marcas de vinos que los más curiosos seguro que se acercarán a esta página para leerlos.

Y en ‘20minutos.es’ damos con el titular “Vino de verano: del blanco al tinto joven, pasando por el rosado”, que nos acerca a todos los tipos de vinos para el verano en unas recomendaciones que nos han parecido interesantes.

Lean: “El vino es cálido incluso cuando es fresco. El verano son muchos los que caen en la tentación y deciden ser infieles al vino, traicionarle con la cerveza por al menos tres meses. Pero no hay porqué renunciar a nada. Dentro de la extensa gama vinícola también existen alternativas para los meses cálidos con vinos blancos, rosados, cavas y algún tinto joven. Basta solo con tener a mano el vino adecuado, una cubitera con hielo y agua y las copas que hagan falta.

El blanco es el rey

Sin duda el primer impulso al pedir una copa en verano es pedir un blanco. Es el acompañante ideal de platos frescos y ligeros de pescado y de ensaladas. Para disfrutarlo en toda su plenitud debe beberse a una temperatura de entre 7 y 10ºC (no más frío, para no correr el riesgo de que pierda aroma y sabor). Para servir el rosado, la temperatura debe oscilar entre los 6 y 10º C

Y como se trata de servirlo frío y de que permanezca frío, no debemos llenar demasiado la copa para que el vino no se caliente. La botella reposará en la cubierta, manteniendo la temperatura deseada y rellenaremos las copas las veces que haga falta. Con el cava debemos seguir ese consejo y más… porque el cava debe servirse aún más fresco, entre 6 y 8º C. Para conseguir esa temperatura nunca debe usarse la nevera, sino abundante hielo y agua. A la hora de servir el cava nada de copas abiertas; deben ser muy estilizadas para dejar subir el hilo de burbujas hasta la superficie.

El rosado y hasta un tinto joven

El vino rosado ha tenido mala prensa. Como si no tuviera ni la altura de un tinto ni la frescura aromática de un blanco. Hubo un tiempo, un mal tiempo, en que se elaboraba mezclando vino blanco y tinto.

Hoy las cosas se hacen mejor y si un rosado lo es se debe a que la piel de la uva tinta se ha dejado poco tiempo en contacto con el mosto. Nace así un vino más claro, con menos intensidad y tanino, que puede variar desde un rosa muy tenue hasta un rojo.

Para servirlo la temperatura del vino debe oscilar entre los 6 y 10º C, y siempre en copas de cristal transparente. El rosado es sin duda un perfecto vino para el verano porque puede estar presente desde el aperitivo hasta el plato fuerte.

En verano, un vino tinto puede entrar muy bien, especialmente si es joven. Los vinos que no han envejecido en barrica pueden beberse a unos grados menos que los tintos con crianza, entre los 12 y 14º C”.

Ya ven, no existe disculpa para olvidarse del vino en estos tres próximos meses en los que esperemos que el sol apriete, pero no ahogue. Feliz verano.