El mundo del vino a sorbos

En el final del otoño y con el invierno apareciendo por la esquina del futuro, le hemos preguntado a nuestro buscador sobre las labores que hay que hacer en la viña en la estación del invierno, porque los que no estamos acostumbrados a visitar el campo, y solamente disfrutamos los vinos, desde su cata, no sabemos de la vida de los viticultores que en este momento están mimando el producto que depositan en barrica o sacan al mercado los vinos jóvenes.

Texto: Antonio Egido

 

En ‘mapama.gob.es’ nos hablan de la “Poda de invierno en la vid”: “Práctica esencial del cultivo de la vid, la poda es una de las operaciones con frecuencia descuidadas por los viticultores; y, sin embargo, el decaimiento de las viñas, la baja cíe cosechas, etc., no tienen otro origen en muchos casos que una mala poda. Por ello, todo lo que se escriba y divulgue sobre lo que es poda y sus fundamentos esenciales, nunca será tiempo perdido, sino una contribución al aumento cíe riqueza en un cultivo tan extenso e importante en España como es el cultivo de la vid.

¿Qué es la poda? Es una operación de cultivo que consiste en cortar ramificaciones de la cepa, en una cierta medida y en determinadas épocas, con objeto de darle forma, vigorizarla y, también, regular y aumentar la producción.

Fundamento de la poda

La planta de la vid no es, en su naturaleza, tal como estamos acostumbrados a verla; en su origen era un arbusto de larguísimo tronco y numerosas y fuertes ramificaciones, que crecen agarrándose fuertemente a otra planta, un árbol, por ejemplo. Es decir, que la vid cultivada que más se aproxima a su estado natural es la que está dispuesta en parra.

Tenemos, pues, un primer fundamento de la poda de invierno, que es la que ahora vamos a estudiar : la vid, en su estado natural, ha de crecer arrimada a otra planta, y sus frutos habrán de aparecer, en general, a una altura o en una forma molesta para recogerlos. Por medio de unos cuidados convenientes se logra darle una forma adecuada, bien conservando su forma alta, bien dejándola a poca altura sobre el suelo, para poder recoger sus frutos con facilidad…

Después de la cosecha, la savia va dejando de elaborarse en las hojas y se va reconcentrando en los sarmientos y brazos, haciéndose cada vez más espesa; la hoja, ya inútil, termina por caer y los sarmientos pierden toda el agua que contienen, “agostándose” , quedando secos y llenos de sustancias alimenticias, que antes transportaba la savia ; mientras tanto, las raíces, en el suelo, dejan de trabajar, y  toda la planta entra en una especie de sueño, que se llama reposo invernal.

Es entonces la época buena para podar, es decir, para quitar algo de envergadura; no es que no se le haga daño a la planta en invierno, es que se la daña menos y, además, está en condiciones, a la primavera siguiente, de reponerse de la operación con mucha más facilidad”.

En ‘vitivinivultura.net’ nos ofrecen un calendario, indicándonos que el mes de diciembre es el de la “caída de las hojas, formación de nuevas raíces.

Cloración de las tuberías de riego para evitar la formación de algas.

Control de malas hierbas.

Control de la humedad del suelo: si no se producen precipitaciones en otoño puede ser necesario algún riego.

Arranque de plantaciones antiguas.

Nuevas plantaciones: decisiones de densidad de plantación, análisis de suelos para portainjertos, contacto con el vivero para reserva de las plantas de vid”.

Y en enero: “poda y tratamientos heridas de poda”, ofreciendo una serie de recomendaciones “que evitaran la implantación y transmisión en nuestras viñas de enfermedades de la madera:

1.- Retrasar todo lo que se pueda la poda y realizarla en tiempo seco.

2.- Desinfectar la herramienta de poda con alcohol o sulfato de cobre.

3.- Quemar o triturar los restos de poda inmediatamente.

4.- Los grandes cortes de poda, realizarlos lo más verticales posibles, y recubrirlos con un mástic protecto”.

Finalmente nos quedamos en “elcorazóndelrioja.com”, donde encontramos la definición de poda, que es la labor que se debe realizar en este tiempo del año como “la labor agrícola consistente en el corte de las ramas de la cepa una vez vendimiadas. En el viñedo, la poda puede realizarse “en vaso” o en “espaldera”; en el primer caso, las ramas quedan más cerca del suelo y una vez crecidos los brotes, la cepa adquiere una forma redondeada. La poda “en espaldera” requiere la colocación de alambres en las cuales se sujetan las ramas de la cepa, quedando más alta y rectilínea. La poda se realiza en invierno y se utilizan tijeras manuales o mecánicas”.

La viña, que hay que cuidar, para que nos dé los vinos que luego podremos disfrutar.