Emilio Barco, su doctorado en Economía y exprofesor de la Universidad de La Rioja

El mundo del vino a sorbos
Artículo de opinión: Antonio Egido

La tractorada, que nunca ha desaparecido de esta Comunidad, sigue de forma intermitente. Por la muerte del ganadero de San Millán de la Cogolla, el pasado jueves, en un trágico accidente de tráfico, resultando herido uno de sus hijos, quisieron concentrarse en El Espolón logroñés -con una asistencia de menos de un centenar de agricultores y ganadores-, el domingo, 18 de febrero, a las 12.00 horas, para rendir 1 minuto de silencio como homenaje el recientemente fallecido, seguido de un largo aplauso.

Antes de la concentración, la portavoz de la coordinadora independiente de agricultores, María Gutiérrez, indicó que «se suspende la tractorada» que tenían prevista con la idea de pernoctar en la capital riojana. No obstante, ha señalado que «nos vamos a reunir para tomar decisiones de nuevas movilizaciones».

Gutiérrez admitió que, a pesar de las amenazas de multas, ha descartado que en la actualidad los convocantes “tengamos miedo», indicando la portavoz que las reuniones del Ministerio de Agricultura con los consejeros de Agricultura y con las OPA previstas para los próximos días, «esperamos que sirva para algo, no como la anterior, y que vaya hacia adelante», ya que «se tienen que dar cuenta que estamos luchando y que no vamos a parar». Si bien significó que en las protestas «ha habido un parón, pero vamos a volver todos a la carga; la gente se tiene que empezar a animar y volveremos otra vez más fuertes que nunca». A pesar de todo, el domingo por la tarde hubo tractorada por distintas zonas de Logroño.

En otro tipo de asuntos, saben que yo me fío mucho de las opiniones de Emilio Barco, con sus análisis no solamente volcados en libros, y que vive ahora en plena jubilación, pero manteniendo, como le corresponde, su doctorado en Economía y profesor de la Universidad de La Rioja, en el Departamento de Economía y Empresa.

Le he escuchado en la cadena SER de La Rioja en conversación con Jorge Gómez y en una larga exposición en el diario La Rioja el domingo, 18 de febrero, en su página 5, titulado ‘¿Qué aplaude usted?’. En la SER se preguntaba ¿qué está pasando en el campo?, recurriendo a Marcos Garcés, un agricultor de Aragón, que afirmaba en una de sus columnas, que los que trabajan en el campo estaban ahora mismo “inmersos en una inestabilidad altísima, provocado por el cambio climático” pero también por “la veloz tormenta de precios y los vaivenes legislativos”. A esto se sumaba “la humillación de la entrada de alimentos de terceros países, con estándares de calidad con los que tenemos que competir, sin unos etiquetados claros” recordando que “un agricultor es un autónomo que necesita grandes inversiones, cada vez con mayor riesgo” por lo que concluía Marcos Garcés y el propio Emilio Barco, que “el resultado es que en el campo hay mucha incertidumbre y miedo”, aludiendo a que “nos impongan normativas sin sentido, para tener una agricultura con agricultores”, rematando Marcos, “que necesitamos que la sociedad nos ayude en este transformación y que se involucre, para no despistarnos del verdadero problema”.

Seguidamente, Emilio Barco se refería a la Agencia 2030 que si bien, muchas veces, es papel mojado, tiene grandes objetivos como suprimir el hambre en el mundo y reducir los daños al planeta, preguntándonos a todos, incluidos a los agricultores, “¿quién puede estar en contra de esos objetivos?”. E insistir que debemos avanzar “hacia modelos de producción más ecológicos, que se reduzca el uso de fertilizantes, que eviten los fitosanitarios y herbicidas más peligrosos, que se controlen los residuos, que se reduzca el número de animales en las granjas, que no se desperdicien los alimentos, que se utilice bien el agua del riego…”, al tiempo de situarse con los agricultores para “que no se le pidan imposibles, incluido el uso del glifosato” mostrando que él está en contra “del libre comercio desde hace 50 años, en los términos en los que se lleva a cabo” y en general que se eche en cualquier lugar “la misma mierda a las lechugas…”.

Finalmente se fija en los precios justos pero preguntando, “por ejemplo, este año, ¿cuál es el precio justo del litro de aceite de oliva virgen? ¿o esto del precio justo solo se aplica cuando bajan los precios y siempre en beneficio del productor y nunca del consumidor?”.

Defiende que la Ley de Cadena Alimentaria, se haga cumplir. Y se fija en la actual PAC 2021-2027, destacando que es posible hacer otra política agraria nacional, que sustente la política agraria comunitaria, destacando “que se haga para las personas, para los ciudadanos” y defendiendo la cultura del campesino, el paisaje, el comercio justo, la diversidad y la solidaridad…

Amén.

Suscríbete gratis a nuestro boletín.¡Pincha aquí!