Texto: Diego Coterón Pascual, Licenciado en Ciencias de la Información
Las redes sociales y las páginas web se han convertido en medios de conversación directos con la audiencia local, nacional e internacional. En 2019, el 85 % de la población de entre 16 y 65 años han empleado alguna red social, siendo las más conocidas Facebook, Twitter e Instagram. La importancia de estos nuevos canales para lograr alcanzar a los posibles clientes es manifiesta.
El bajo coste que supone su mantenimiento y las posibilidades que ofrecen a las diferentes empresas, convierten a las redes sociales en un elemento imprescindible para la comunicación. Sin embargo, debe de crearse un plan que marque objetivos y coordine los mensajes emitidos tanto online como offline, manteniendo la coherencia y mostrando una imagen cohesionada y única que aumente el valor de marca de la empresa.
Diversos estudios indican que los usuarios de las redes sociales las emplean, principalmente para chatear, visionar vídeos o fotografías y conocer qué hacen sus contactos. Esto abre un campo a explotar en el terreno comunicativo y empresarial, al conocer qué motivaciones tiene el público al usar las redes sociales y permite anticipar el contenido y la fórmula para llegar a ellos.
El sector vinícola no es ajeno a esta nueva forma de comunicar y relacionarse con los diferentes públicos objetivos de las bodegas. Es necesario elaborar una estrategia y un plan de redes sociales que tenga objetivos definidos, creen contenidos de calidad y ahonden en la conversación con los diferentes públicos, segmentando los mensajes en función de las diferentes necesidades.
Cada vez, son más las bodegas que emplean los nuevos canales para comunicarse con el público. A la vista de los estudios que existen, la comunicación debe estar dirigida por profesionales que conozcan los medios y las técnicas comunicativas, para que la cohesión de los mensajes y las estrategias resulten efectivas y útiles, orientadas a los objetivos a lograr y con mensajes atractivos para el público al que se dirijan.
Atraer al público y ser determinante en el proceso de elección de visita o compra son los objetivos a lograr. Esto solo puede conseguirse si todos los engranajes de la comunicación están dirigidos por profesionales comunicadores.