35 ANIVERSARIO DE LA COFRADÍA DEL VINO DE RIOJA
Texto: Antonio Egido
Asegura Javier Gracia Lería que la Cofradía del Vino de Rioja, fundada el 30 de junio de 1984, “nació auspiciada por el Consejo Regulador y por bodegueros para promocionar el vino de Rioja lo que supuso un inicio increíble, con una mayoría importantísima de representantes del sector del vino, gente de mucho abolengo, lo que a mí me parece que fue un gran acierto”. Cita a varios de los fundadores, como Santiago Coello, “el cofrade con el número 2, alma mater del Consejo Regulador de aquellos tiempos”, los López de Heredia, Josechu Bezares, Javier Martínez, Javier Pascual…, para concluir que la realidad actual de la Cofradía “es muy distinta, pues el sector del vino está representado por un 20% de los cofrades, mientras que el 80% son personas a las que les gusta el tema del vino y conforman, como a mí me gusta decir, el voluntariado de la promoción y difusión de la cultura del vino de Rioja”.
La Cofradía se mantiene cercana a las bodegas, a las que se ofrece para colaborar en sus fines promocionales y, como de todo debe haber, “hay bodegas que entienden perfectamente el papel de la Cofradía y, dicho sea entre comillas, nos usan”. El Gran Maestre sostiene que la Cofradía no ha vivido momentos de subidas o bajadas espectaculares a lo largo de su historia, sino que siempre ha ido creciendo y evolucionando. Recuerda los comienzos en un piso de Avenida de la Paz, “cuando nadie imaginaba que se iba a comprar una sede como la actual de la calle Horno”, pero hace gala también de sinceridad al reconocer que “esto no se ha acompañado con la nómina de cofrades, ya que hemos llegado a ser 500 y ahora estamos 280”. “Se suman las bajas por fallecimientos o porque alguno se inscribía solo por decir que era de la Cofradía del Vino y tener el diploma, a lo que debemos añadir que el asociacionismo en este país es complicado. No obstante, yo siempre digo que es mejor que estemos pocos pero participando, a que haya una masa de socios que sean ajenos a esta Cofradía. De los cofrades que somos ahora, a unos les gustan las tertulias, a otros las catas, a muchos los capítulos, a algunos las visitas a las bodegas… por lo que más de la mitad de los cofrades están participando de forma presencial en las actividades que organizamos”.
Javier Gracia tiene claro que llegar a la gente joven debe ser actualmente uno de los objetivos de la Cofradía, aunque reconoce que es lo más difícil. “Hemos colaborado durante muchísimos años con El Rioja y los 5 Sentidos, hemos invitado a colectivos de todo tipo con la idea de atraer a esos jóvenes, pero claro, la gente joven viene a una cata, les encanta y algunos te dicen que quieren seguir, pero a la hora de hacerse de un colectivo, no dan el paso final. No obstante tenemos 3 compañeros que llevan las redes sociales, para acercarnos a los jóvenes, porque no debemos olvidar el relevo generacional que como en el resto de Asociaciones, se debe ir produciendo. Incluso chocamos con la opinión de que somos un coto cerrado, y la verdad es que es al contrario, porque cada vez esto es más para todo el mundo”.
Con un mínimo de actividades de una tertulia y una cata al mes, la Cofradía del Vino de Rioja también colabora en la promoción del vino de Rioja fuera de la Comunidad Autónoma. “Con un grupo de cofrades que participa activamente hacemos alrededor de 20-25 salidas al año. Las colaboraciones que mantenemos con el Gobierno y el Consejo Regulador nos exigen unas contraprestaciones, como el hacer catas o seminarios con los vinos institucionales de la Denominación en cinco o seis ciudades de España”. Cita como ejemplo las dos últimas catas-seminario en el Casino de Anaka en Irún y en el Balneario de Elgorriaga en Navarra, así como la colaboración en la reciente presentación de los Grandes Ecovinos 2019 en el Centro Riojano de Madrid.
Para Javier Gracia la Cofradía ha sido “punta de lanza de lo que hace años ni existía y que ahora se denomina enoturismo, como las cenas maridajes, los conciertos de música con copas de vino, los nombramientos de cofrades de mérito o los hermanamientos que nos permitían traer a nuestra ciudad a los principales productos gastronómicos de España y otros países como Francia o Suiza con la colaboración del Ayuntamiento de Logroño, hasta que la misma quedó suspendida en las dos últimas legislaturas del gobierno municipal”. Anuncia el Gran Maestre que intentará recuperar este hermanamiento, así como el concurso de catadores de Logroño, con el nuevo equipo de gobierno municipal.
Y es que no deja de resultar muy atractiva la procesión de cofrades por Logroño o cualquier ciudad de España, “incluso yo diría que marcamos tanta tendencia que hasta nos hemos convertido en un referente dentro de las cofradías gastronómicas y vínicas, te pones el traje en cualquier sitio y causas sensación”. “Y cuando nos ven realizar el acto de nombramiento de nuevos cofrades, a todo el mundo le gusta la parafernalia y los que no lo han visto nunca se quedan asombrados, por lo que yo, en mis doce años de presidencia, le he dado seriedad a este acto, pues no deja de ser un signo identificativo de nuestra Cofradía, resultando un espectáculo muy bonito. Por ello las nuevas Cofradías se han amparado en nuestras directrices o han copiado nuestros Estatutos para hacerlos suyos”.
Finalmente el Gran Maestre se extraña de que los niños riojanos no tengan como actividad durante su curso escolar acudir al campo y ver las diferentes fases del crecimiento de las uvas, o que en Logroño no exista una ruta turística para pasear por el Logroño del vino. “Fede Soldevilla nos hizo un recorrido por las calles y edificios emblemáticos del vino en Logroño, que ha tenido ahora su continuidad con una ruta creada por el Ayuntamiento, que espero se mantenga. Todo lo que hagamos entre todos por el vino será siempre bueno y nos servirá para valorar mucho más lo que tenemos”.
Dado que el cierre de este número de La Prensa del Rioja es anterior a la celebración del Gran Capítulo, Javier Gracia aprovecha para recordar que “llegan las fiestas navideñas y seguro que tendremos ocasión de brindar en la Cofradía en alguno de los actos preparados”, deseando a todos los cofrades “alegría y felicidad para el nuevo año 2020”.
*Artículo publicado en el nº230 de La Prensa del Rioja
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