El mundo del vino a sorbos
Con el atractivo, ya semanal, de que Internet nos ofrezca no pocas sorpresas, hemos querido solicitar a nuestro buscador, los diferentes resultados que nos hablen de la combinación de las palabras vino y universidad, en principio con el deseo de saber lo que hacen esas escuelas del saber y la investigación que son los recintos universitarios, aunque lo mismo este medio de relación social llamado Internet nos lleva a otras realidades…
Texto: Antonio Egido
De hecho la primera página que encontramos válida y no excesivamente pasada en el tiempo, es ‘es.paperblog.com’ donde se nos habla de un curso de cata y vino en la Universidad de Salamanca con este texto inicial: “Que se impartan clases o se investigue sobre antocianos -les remito a mi post sobre el homenaje al prof. Julián Rivas-, flavonoides, levaduras, resistencia a plagas en la vid o la influencia de los distintos tipos de madera en la crianza de un vino no es extraño en el ámbito universitario, pero cuando hablamos de que se ha impartido un curso durante varias semanas titulado “El vino y la cata“, la cosa cambia y podemos decir que el tema es más bien extraordinario.
Detrás encontramos a un equipo amante del vino y que pretende acercar su conocimiento y, por lo tanto, su disfrute a miembros de la comunidad universitaria: el profesor Félix Torres como coordinador del curso y los chicos de Bakcheia (Alberto Nieto y Javier Bobo, exalumnos) como organizadores de toda la infraestructura, que no es simple, si estamos hablando de acercar no sólo vinos nacionales con 11 muestras, sino también internacionales, presentando de estas últimas 17 elaboraciones de todo el mundo “mundial” con vinos tan heterogéneos que van desde espumosos de moscatelbrasileños a pinto gris checos, catarratosicilianos, cabernet francalemanes, tannaturuguayos, malbecargentinos, syrah chilenos, merlot mejicanos, cabernet sauvignonperuanos, cabernet franc búlgaros, merlot y malbec franceses, sangiovesesitalianos, grasade Rumanía o rizling-vlasskyeslovacos, sin olvidar verdejos, tinta de toro o prieto picudo españolas”.
En el enlace con la Universidad de La rioja encontramos una información sobre el Instituto de Investigación de Ciencias de la Vid y el Vino de la que forma parte y que a lo largo de este año será inaugurado oficialmente en la Grajera, donde el Gobierno de La Rioja tiene su bodega institucional. En ‘unirioja.es’ Nos dicen que “El ICVV se concibe como un centro de referencia en la investigación, con dos pilares fundamentales: la existencia de una actividad investigadora de importancia internacional, y el impulso de la transferencia de los resultados y la tecnología a la sociedad y el sector productivo.
Por ello, el Instituto contará desde un principio con una plantilla de alrededor de 50 personas, entre investigadores (20) y personal técnico y de apoyo (30), aportados por el propio Gobierno de La Rioja, el CSIC y la Universidad de La Rioja. El campus aportará a 10 de los 20 investigadores iniciales y a otros 10 miembros de la plantilla de apoyo, es decir, a casi la mitad del personal.
Además, en la constitución del ICVV tendrá una especial importancia la creación de una Oficina de Transferencia de los Resultados de la Investigación.
Por otra parte, el convenio contempla la posibilidad de que nuevas entidades puedan adherirse al presente convenio”.
Y un último enlace que, para el que no lo haya visto, tiene su interés por todo lo que supone acercarse al mundo del vino, pero a través del vino. Nos referimos a la «Matemáticas y vino» del matemático Luis Balbuena Castellano, que se encuentra en esta dirección https://www.youtube.com/watch?v=XBTHp2F5V0U y que fue una actividad más que formó parte del ciclo de conferencias celebrado con motivo de la exposición «Imaginary: el sabor de las matemáticas» en el edificio del Rectorado de la Universidad de Málaga, hace ya dos años, y donde agradablemente nos encontramos con la relación de dos mundos muy diferentes pero que tienen sus confluencias. No les va a defraudar.
La verdad es que son pocos los enlaces que hemos conseguido considerados como válidos para nuestra muestra semanal, lo que supone un tanto decepcionante porque lo que no podemos llegar a pensar es que la investigación sobre el mundo del vino brille precisamente por su ausencia en lo que debería ser el ágora del conocimiento.
