El mundo del vino a sorbos
Pensando siempre en el futuro, no debemos olvidar que los niños actuales serán los protagonistas de la próxima y siguiente década y todo lo que no les enseñemos ahora, será terreno perdido. En estos días se habla mucho de la educación que reciben los niños y que con el paso de los años les puede llevar a aptitudes que salen de toda lógica.
Por ello le hemos solicitado a nuestro buscador que nos aporte información sobre lo que se está haciendo cerca de los niños sobre eso que denominamos cultura del vino. Y lo primero que nos encontramos es con el enlace ‘elmundo.es’ donde nos dicen –ojo, noticia de diciembre del año 2016- que “Parlamentarios franceses proponen que los niños reciban clases sobre los beneficios del vino”, y un texto en el que leemos: “Saber apreciar las bondades del vino podría formar parte de las lecciones que reciben los niños franceses. Un grupo de parlamentarios galos ha pedido a través de un informe que se debata la conveniencia de hacer una campaña que fortalezca desde las escuelas un sector cada día más debilitado por la importación.
La exportación y el consumo local del vino han caído con fuerza en un país donde los vinicultores son una figura histórica. Los tiempos cambian y un 92% de los menores de 25 años prefieren otras bebidas alcohólicas, según el informe parlamentario que ha originado el debate en la Cámara francesa.
«Para mantener una posición importante en el mundo, el vino francés debe asumir primero un lugar fuerte en casa», señala el informe, que pide programas educativos para informar desde Primaria acerca de los orígenes, la historia y todo aquello que ha caracterizado desde siempre al caldo galo. «A aprender acerca de una vida sana se comienza desde la infancia y en la escuela primaria», agrega el documento.
El informe se centra en la promoción del producto autóctono, no en los beneficios de la bebida ‘per se’: «Enseñar a nuestros hijos sobre los productos regionales, cómo se cultivan y se transforman para adquirir su sabor (…) ayudarlos a mantener su salud y promover las demandas de calidad y respeto por la naturaleza».
La industria vinícola, piedra angular de la vida francesa, emplea a unas 75.000 personas. Sin embargo, desde algunos sectores se acusa a las medidas tomadas en defensa de la salud para explicar la caída de su consumo. En la actualidad, se estima que cada francés bebe 55 litros anuales, mientras que en 1970 eran alrededor de 100 litros, según el informe”.
Cuánto nos queda todavía para seguir aprendiendo de los franceses en el mundo del vino… o de los italianos, pues leemos en ‘mundo.sputniknews.com’ que “las autoridades de Italia se plantean que los escolares de entre 6 y 13 años tomen clases dedicadas a la elaboración del vino nacional”.
Sí, y nos acercamos a esta información para descubrir que “Este plan fue presentado por Dario Stefano, senador del partido Sinistra Ecologia Libertá.
Según el político, «el vino es un signo de identidad de Italia, y es tiempo de introducir ‘historia del vino’ como asignatura obligatoria».
El Gobierno asignará unos doce millones de euros para enseñar a los profesores, que darán clases de vino durante una hora a la semana, de ser aprobado el proyecto.
«No intentamos enseñar a los niños a beber. Las nuevas clases solo enriquecerán la educación de nuestros escolares. No esperamos de los niños que se conviertan en músicos aunque estudien música en el colegio», agregó.
Italia es actualmente el mayor productor de vino a nivel mundial, según la Organización Internacional del Vino (OIV). El vino es uno de los productos italianos más exportados (48,9 millones de hectolitros) y más valorados internacionalmente”.
Aunque existen experiencias españolas que debemos destacar, por ejemplo la que nos ofrece ‘riojatrek.com’, es decir “Viticultor por un día, con niños.
Esta actividad está pensada para que tú y tus niños seáis protagonistas de una tradición ancestral: la vitivinicultura, es decir, el cuidado de la vid y la elaboración del vino.
De la mano de un profesional podréis realizar diferentes actividades en los viñedos y en la bodega, y aprenderéis en profundidad todo el trabajo que conlleva hacer un buen vino de Rioja.
Aprender practicando
Con esta jornada pretendemos que los niños comprendan aspectos básicos del paisaje, la vegetación, las uvas, el mosto y el vino. Queremos enseñar que el vino es un producto natural que forma parte de nuestra cultura y nuestra vida”, siendo la oferta de experiencias muy variadas ya que van desde “3 horas de experiencias” al “aperitivo riojano”, pasando por “experimentos en bodega”, “bodega de cuento” o “llévate un recuerdo”.
Volvemos al principio de nuestra exposición, lo que no aprendan de pequeño, de forma sencilla, será complicado hacérselo comprender de mayores, y la educación de los futuros consumidores de esta bebida debe comenzar ya.