El acuerdo se tomó en el último pleno presidido por Fernando Salamero, en el que también se decidió la puesta en valor de los viñedos viejos y centenarios de la DOCa Rioja
En la última sesión plenaria del Consejo Regulador de la DOCa. Rioja presidida por Fernando Salamero celebrada el viernes 18 de junio, se han adoptado importantes acuerdos para la Denominación. En primer lugar, se han aprobado las ‘Normas de Campaña’ que regularán la campaña de 2021, en la que se permitirá la entrada en bodega de un volumen equivalente al 100% de los rendimientos establecidos por las normas de la Denominación (6.500 Kg. por hectárea para uvas tintas, y 9.000 Kg. por hectárea para blancas), y un rendimiento de transformación del 70%.
Detalle de las Normas de Campaña 2021:
- En el caso de las uvas tintas, el máximo amparable será del 95%, es decir, de 6.175 Kg. por hectárea, mientras que el 5% restante (325 Kg.) podrá destinarse a stock cualitativo o a vino común si dicho stock no queda formalizado.
- En el caso de las uvas blancas, el máximo amparable será también del 95%, es decir, de 8.550 Kg. por hectárea, destinándose el 5% restante (450 Kg.) a vino común.
- La formalización del stock regulador deberá efectuarse antes de la vendimia y en todo caso antes del 1 de septiembre; de renunciarse a amparar dicho stock en los tres años siguientes, el inventario solo podrá destinarse a destilación. Como novedad para la campaña 2021, si el stock no hubiese sido amparado a partir de 2024, también tendría que ir a destilación.
- En lo que se refiere al rendimiento de transformación, la ratio para este año se fija en 70 litros de vino por cada 100 Kg. de uva.
Plan para potenciar viñedos viejos y centenarios
El Pleno del Consejo Regulador ha convenido por unanimidad que los viñedos viejos y centenarios constituyen un elemento distintivo y diferenciador de la Denominación de Origen Calificada Rioja, el cual debe ser protegido y potenciado. En este sentido, se ha acordado que, con carácter transitorio y hasta el año 2030, se considerarán viñedos viejos aquéllos plantados en el año 80 o anteriores, mientras que partir de ese año lo serán aquéllos con 50 años o más, con el fin de hacerlo concordante con la edad de referencia de las ayudas de las CCAA al viñedo viejo.
Como parte del plan acordado, se llevará a cabo una batería de medidas entre las que destacan la elaboración de un registro de viñedos viejos y centenarios, su geo-referenciación y señalización, la aplicación de una reducción transitoria de la cuota del Consejo Regulador sobre la producción de estos viñedos, el desarrollo de actividades formativas para viticultores dirigidas a optimizar su manejo y preservación, y el fomento del uso de las menciones correspondientes en el etiquetado de los vinos así como su puesta en valor mediante acciones de comunicación y promoción específicas.
Por otro lado, el Consejo Regulador propondrá a las administraciones competentes, que parte de los fondos de reestructuración se utilicen para primar este tipo de cultivo, y que se empleen más recursos de los planes de desarrollo rural en la parte medioambiental para incentivar la conservación de estas parcelas.