Lo afirman las entidades representativas del sector europeo del vino ante las conclusiones del estudio complementario sobre el impacto del reglamento SUR, publicado por la Comisión Europea, que califica de irrelevante la previsible disminución de la producción de uva en la UE ya que no es un cultivo esencial.
Las entidades representativas del sector vitivinícola europeo reivindican la importancia del vino en Europa ante las conclusiones del reciente estudio de la Comisión Europea sobre el impacto del reglamento SUR de uso sostenible de fitosanitarios. En él se indica que es irrelevante la previsible disminución de la producción de uva ya que no es un cultivo esencial.
Organizaciones del sector vitivinícola español, francés e italiano han tomado nota del estudio complementario que acaba de publicar la Comisión Europea sobre las consecuencias del reglamento SUR sobre el uso sostenible de los productos fitosanitarios en Europa.
La Unión Europea es el principal productor de vino del mundo, representando el 45% de la superficie de viñedo del mundo. Este sector de alto valor añadido es vital para muchas regiones rurales europeas, genera millones de puestos de trabajo y contribuye significativamente a la balanza comercial de la UE.
Sin embargo, este estudio prevé una caída en la producción de uva debido a los efectos de la reducción de pesticidas estimados en el el 18% en España, el 20% en Italia y el 28% en Francia y, sin siquiera evaluar el impacto de cambio climático que habría que sumar a esta cifra.
Añade en el estudio la Comisión Europea, que la producción de uva no es un cultivo esencial para la seguridad alimentaria europea y que la disminución de la producción de vino en Europa sería irrelevante.
Según el comunicado conjunto de las entidades representativas del sector vitivinícola europeo, “estas afirmaciones ignoran la enorme contribución económica, social y cultural del sector vitivinícola en muchas regiones de la UE. Esta actitud es totalmente inaceptable por parte de las organizaciones representativas de la cadena de valor del vino de España, Francia, e Italia que secundan este comunicado. Resulta incomprensible que la Comisión Europea asuman y prevea la penalización de todo un sector de gran relevancia para la economía europea.
Los operadores y empresas del sector vitivinícola llevan mucho tiempo comprometidos con la transición ecológica y lo van a seguir estando. Todavía queda mucho trabajo por hacer y nuestros productores deben poder seguir con este compromiso con la sostenibilidad ambiental sin controversias innecesarias.
Por lo tanto, pedimos que los Estados miembros y los eurodiputados adopten una posición clara sobre este tema. El vino es un importante producto económico y cultural en Europa. Nuestro sector pide apoyo para seguir con las acciones de transición ecológica con regulaciones realistas y un calendario operativo, que permita aplicar soluciones alternativas eficaces existentes y por venir”.