Bodega Carlos Moro comienza su andadura en el mundo del enoturismo con una propuesta enológica con la que pretende convertirse en un referente cercano y accesible para visitantes y turistas por su excelente situación geográfica y sus recién adaptadas instalaciones. La bodega se ubica en una ladera con excelentes vistas a la localidad de San Vicente de la Sonsierra, Rioja, en un entorno de enorme riqueza paisajística y cultural.
El objetivo de Bodega Carlos Moro de impulsar la cultura del vino se ve fortalecido por la experiencia enoturística en esta zona desde hace décadas. La Bodega da a conocer a los visitantes también sus viñedos, ubicados en excelentes localizaciones, para mostrar el trabajo que se realiza durante todo el año en el campo, y acercar los diferentes estados fenológicos.
A través de un elevador acristalado los turistas pueden recorrer cómodamente las diferentes plantas y salas de elaboración de vino para contemplar el proceso productivo enológico. El edificio consta de un diseño con diferentes niveles entre las distintas dependencias de elaboración, crianza, embotellado y expedición que permite el manejo de la uva y el trasiego de los vinos por gravedad y máximo cuidado de la uva.
En su impresionante calado subterráneo, de 1.200 m2 de superficie, los visitantes pueden pasear y disfrutar del descanso del vino en las mejores barricas de roble francés y americano e incluso catar los caldos que allí descansan. Además, los visitantes pueden pasear por la tienda y disfrutar de los vinos en el Wine bar o en la sala de catas.