IN MEMORIAM

El Premio Prestigio Rioja fue creado en 1993 por el Consejo Regulador de la D.O.Ca. Rioja con el objeto de hallar un nuevo camino para mejor difundir el gran prestigio de sus vinos, distinguiendo para ello a personas e instituciones de alto prestigio internacional en el mundo de la cultura, el arte, la ciencia, la empresa, la gastronomía y el deporte, algunos de los cuales ganaron más tarde el Nobel.

Texto: Gonzalo Sol, secretario del jurado del Premio Prestigio Rioja

 

La relación del conjunto de premiados es realmente espectacular, como lo ha sido la de miembros del Jurado, entre los queAdrián Piera Jiménez merece ser destacado, hoy más que nunca, en recuerdo a su gran labor desde la primera reunión de Jurado en otoño de 1993, hasta la de 2012, en la que fue premiado Ferrán Adriá. No pudo sin embargo asistir a la última reunión del pasado 3 de noviembre, pues le fue impedido por la rápida enfermedad que se lo llevó sólo doce días más tarde.

Adrián, licenciado en derecho, dirigió en su juventud con éxito “Maderas Piera, S.A.”, unaimportante empresa familiar en la que formó ese carácter empresarial, humano, honesto y solidario que le llevó a dirigir con éxito durante muchos años la Cámara Oficial de Comercio e Industria de Madrid, así como el Consejo Superior de Cámaras, encabezando y coordinando al tiempo importantes grupos internacionales empresariales e incluso gubernamentales creados para lograr mejores relaciones con La Unión Soviética, por ejemplo, China, Yugoeslavia y Japón; fue además cónsul de Singapur, logrando siempre los esperables resultados de su bien hacer eficiente, amable y humano.

En cuanto al vino, aprovechándome de su interés por ese sector agrícola y cultural, él fue quien me ayudó a introducir en el Instituto de Formación Empresarial de su Cámara de Comercio el primer Curso de Sumilleres impartido en España. El Consejo Regulador de la D.O.Ca. Rioja fue desde el principio un importante patrocinador y protagonista del Curso (Premio Nacional de Gastronomía). Ese carácter emprendedor de Adrián, su cultura general y artística -además de un amante de la música, fue un magnífico acuarelista hasta que unas máculas quitaron luz y color a sus ojos-, así como su buen conocimiento del mundo del vino y de su trascendencia agrícola, comercial y social en la creación del Mare Nostrum, ha venido siendo fundamental durante los más de 22 años transcurridos en la importante labor de apoyo a los Grandes Vinos de España.

La esquela publicada por su familia el 16 de noviembre pasado, muestra claramente la humildad con la que Adrián, pese a sus enormes éxitos, abrazaba su forma de vivir y de entender España.Habiendo contagiado a su familia con ese don, ésta supo eludir la frecuentemente larga relación de títulos, premios y honores, y en la misma indicaron sólo una: “madrileño”.

Adrián Piera está ahora sin duda en otras labores junto a miembros del Jurado que nos han ido dejando: Francisco Grande Covián, Horacio Saénz Guerrero, Ángel Martín Municio, Camilo José Cela, Sabino Fernández Campo y Antonio Mingote. Ellos vigilarán que en el futuro sigamos acertando. En nombre de quienes aún podemos ver crecer la calidad y prestigio de nuestros viñedos y sus frutos, muchas gracias a Adrián y muchas gracias a todos,… incluido el Consejo Regulador de la D.O. Ca. Rioja, que ha sabido reunirnos durante 22 años con el objeto de ayudarle a enaltecer sus Grandes Vinos, emparentándolos con importantes personajes que recibieron y recibirán el Premio Prestigio Rioja.