·       La cosecha 2012, marcada por la sequía, ha ofrecido vinos de altísima calidad, en línea con los de las dos cosechas anteriores.
 
·       El alto nivel de exigencia para superar la calificación mantiene a Rioja como referente de la máxima calidad.
 

El Consejo Regulador ha otorgado a la cosecha 2012 de Rioja la valoración oficial de «MUY BUENA» como resultado del riguroso proceso de calificación mediante análisis y cata al que han sido sometidos los 253,84 millones de litros de vino elaborados por las bodegas y representados por un total de 3.800 muestras tomadas directamente de los depósitos por los técnicos del Consejo. Esta valoración global refleja la heterogeneidad de una cosecha marcada por la sequía, que afectó cuantitativa y cualitativamente a una parte del viñedo, pero que ha ofrecido un volumen importante de vinos de altísima calidad, en línea con los obtenidos en las dos cosechas anteriores, consideradas ambas ‘excelentes’.
 

La superior categoría de ‘calificada’ que ostenta la D.O. Ca. Rioja exige la calificación de todos los vinos elaborados, depósito a depósito, lo cual proporciona una excelente base técnica para la evaluación global de la añada realizada por el Pleno del Consejo Regulador mediante un procedimiento estadístico establecido a tal fin con total objetividad. Los requisitos para superar el examen de calificación se han elevado en los últimos años, incorporándose parámetros de calidad más exigentes, con el objetivo de que Rioja siga manteniéndose en los mercados como referente de los vinos de calidad.
 
El mes de noviembre comenzaba el proceso de calificación de la cosecha 2012, con un programa de recogida de muestras en todas las bodegas elaboradoras por parte de los veedores del Consejo Regulador, muestras que deben ser representativas de partidas no superiores a 100.000 litros. Cada muestra ha sido analizada en el laboratorio de una de las tres Estaciones Enológicas de la D.O. y valorada por un comité de cata integrado por tres catadores, que forman parte del panel de cata externo con que cuenta el Consejo Regulador y al que pertenecen más de un centenar de expertos. El procedimiento para la valoración organoléptica está debidamente reglado, garantizándose la confidencialidad y anonimato de las muestras catadas.
 
Las 3.800 muestras de la cosecha 2012 presentadas a calificación han sido sometidas a este riguroso control analítico y de cata, que han debido superar cada una de ellas para tener derecho al amparo de la Denominación. Finalmente han sido calificados 244,74 millones litros (12,59 de blanco, 12,70 de rosado y 219,45 de tinto). El resto de vinos elaborados, hasta el total de 252,17 millones de litros presentados a la calificación, no ha sido calificado en su mayor parte por corresponder a excesos de rendimiento en la producción (6,52 millones de litros), siendo rechazadas por no superar la prueba analítica o sensorial tan solo 49 muestras, lo que da idea del alto grado de perfeccionamiento técnico alcanzado en las elaboraciones.
 
Uvas sanas y profesionalidad, factores decisivos
 
Tras un ciclo vegetativo caracterizado por la sequía, cabe destacar como incidencia climatológica significativa el efecto de las lluvias caídas a finales de septiembre, que influyeron muy positivamente en la evolución de la maduración, proporcionando un mejor equilibrio final al fruto e incrementando las expectativas productivas de una gran parte del viñedo riojano. La uva cosechada presentó en su mayor parte un magnifico estado sanitario y un excelente equilibrio madurativo entre graduación alcohólica y polifenoles, lo que permitió elaborar vinos de gran calidad, con buena estructura polifenólica, especialmente aptos para la crianza en barrica y larga guarda.
 
Para el buen resultado final de esta cosecha 2012 también ha resultado decisiva la gran profesionalidad de viticultores y bodegas a la hora de planificar el desarrollo de la vendimia, dado que la maduración se presentaba de forma desigual entre las diferentes parcelas, lo cual exigió realizar de una manera selectiva la vendimia para obtener la máxima calidad en cada uno de los viñedos.
 

El volumen total de producción de la cosecha 2012 en Rioja fue de 354,9 millones de kgs. de uva, con uno de los rendimientos por hectárea más bajos de las últimas dos décadas (5.710 Kg /Ha.) y un descenso significativo respecto a la cosecha del año anterior, que fue de 387 millones de kgs. de uva. Las 62.154 hectáreas de viñedo productivo en la Denominación para esta cosecha 2012 se repartían en 58.389 hectáreas de variedades tintas, de las que se obtuvieron 331 millones de Kg. de uva, y 3.765 hectáreas de variedades blancas, cuya producción fue de 23,8 millones de Kg. La producción total finalmente amparada fue de 351,5 millones de Kg. de uva, ya que 3,4 millones de Kg. fueron descalificados por excesos de rendimiento, elaborándose un total de 253,84 millones de litros.