El mundo del vino a sorbos

La climatología, con la continua mirada que hacen los agricultores a los mapas y al cielo, es uno de los grandes factores que influye en los datos finales de las vendimias de cada año, junto al suelo. La llegada de una helada que dejó el campo paralizado, junto al estrés hídrico, está provocando una vendimia en general corta en España. Pero ¿qué está ocurriendo en el resto de Europa, en los países vinateros por naturaleza?

Texto: Antonio Egido

En ‘agrodigital.com’ leemos el titular “La vendimia 2017 en el UE alcanza la cifra más baja de los últimos 35 años”, que da paso a la siguiente información: “Las condiciones meteorológicas adversas en 2017, incluidas las tormentas de granizo y las fuertes heladas en la primavera, así como la sequía en el verano, causaron daños considerables a los viñedos de toda Europa. Como resultado, la mayoría de las regiones vitícolas de Europa esperan una vendimia muy baja para 2017.

La vendimia en 2017/18 en la UE podría alcanzar unos 145,1 millones de hectolitros, unos 22 millones de hectolitros (-14 %) inferiores a los del año anterior y 5,5 millones de hectolitros inferiores a la campaña 2012-2013. Esta cifra es la más baja en los últimos 35 años. En la campaña 1982/83 se llegó a 140, 06 millones de hl.

Los principales países productores de vino de la Unión Europea prevén descensos significativos en el tamaño de sus producciones: España espera que la vendimia sea un 16 % inferior en comparación con el año anterior, Francia un 17 % e Italia un 21 %”.

En la Semana Vitivinícola se hacen eco de esta información, indicando en su web ‘sevi.net’ y en un artículo firmado por Alfredo López que “La Dirección General de Agricultura (DG Agri) de la Comisión Europea ha avanzado los primeros datos, a finales de septiembre pasado, sobre la producción vitivinícola de la campaña 2017/18, con una previsión de apenas 145,1 millones de hectolitros, que supone un 14,4 % y más de 24 millones menos que en la campaña pasada.

Se trata, además, de la campaña con un volumen históricamente más bajo, al menos desde la campaña 2001/02, aunque probablemente en revisiones posteriores aún pueda descender mucho más. Sobre la media del último quinquenio 2012/13-2016/17, que fue de 168,5 Mhl, la producción prevista en la campaña actual es también prácticamente un 14 % inferior”.

Y finalmente nos detenemos en ‘agro-alimentarias.coop’ que nos dicen que: “Ángel Villafranca y Thierry Coste han presentado la estimación del COPA-COGECA que alcanza uno de los niveles más bajos que se recuerdan, para situarse en aproximadamente 145 millones de hl, debido esencialmente a las condiciones meteorológicas adversas y los efectos del cambio climático.

Ángel Villafranca, presidente de Cooperativas Agro-alimentarias de España y vicepresidente del Grupo de Dialogo Civil de Vino, ha presentado junto a Thierry Coste, presidente del grupo de trabajo Vino del COPA-COGECA, la estimación europea. Coste ha señalado que “nuestros viñedos se han visto gravemente afectados por el impacto del cambio climático y condiciones meteorológicas adversas como las heladas y las sequías; y se estima que la vendimia sea un 14 % inferior a la registrada el año anterior. Las condiciones meteorológicas han provocado una cosecha precoz en toda Europa; muchos productores han realizado su vendimia dos meses antes que la media».

Francia e Italia son los dos países productores más afectados; en Francia, la vendimia alcanzará los 37 millones de hl, un nivel históricamente, lo que supone un descenso del 18 % en comparación con el año anterior. En Italia, se estima una vendimia de unos 40 millones de hl, con una disminución del 26 % respecto al año 2016. Respecto a la producción española se estima en unos 36 millones de hl, lo que supone un descenso del 20 % en comparación con el nivel registrado el año anterior. Portugal es el único país donde se produce un aumento del 10 % respecto a 2016. Con respecto a la calidad, se espera que sea muy buena en toda Europa, lo que permitirá obtener un vino excelente”.

Datos que nos sirven para el análisis y la toma de decisiones, de manera especial todas aquellas que nos afectan por el cambio climático que sin ser el determinante, está influyendo, y mucho, en el campo español.  

 

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