El mundo del vino a sorbos

Texto: Antonio Egido

Al hilo del concurso convocado por la Asociación Igual a ti y Bodega Carlos Moro sobre los brindis literarios, del que el 15 de junio sabremos oficialmente los ganadores, y del brindis por el vino de calidad que realizaron la semana pasada 27 Denominaciones de Origen y 13 Comunidades Autónomas, en el llamado Día Movimiento Denominación de Origen, hemos querido recurrir a nuestro buscador para saber los brindis más conocidos, más repetidos o más recordados.

Pero antes de nada, vamos a ponernos en disposición de hacer un brindis. En ´cocinayvino.com´ nos hablan del “Protocolo del brindis, las normas básicas”, que son las siguientes:

1.- El primer brindis debe estar ofrecido por el anfitrión de la reunión. En el caso de las bodas, es trabajo del padrino realizar la primera dedicatoria.

2.- En el caso de las bodas formales, el brindis debe suceder a la cena. Para las menos formales, el acto se realiza luego del baile del vals o primer baile.

3.- Mientras se realiza el brindis, las demás personas deben permanecer en sus lugares, siempre de pie, y sin tomar de la bebida.

4.- Cuando se es el agasajado con el brindis, debe darse las gracias tras finalizar el discurso de homenaje. Los demás invitados esperan el agradecimiento para finalizar el brindis.

5.- La copa no debe alzarse más arriba de los ojos.

6.- Mientras realiza el discurso de agasajo, mire a los ojos al anfitrión u homenajeado.

7.- Es considerado de mal gusto chocar las copas. Es suficiente con alzarlas y hacer el gesto hacia el resto de los invitados.

8.- Otro acto de mal gusto es decir la palabra “chinchín”.

9.- Dependiendo de la ocasión, debe realizarse el brindis con champán, cava o algún otro espumante. En actos menos formales se admiten otras bebidas como vinos y destilados, inclusive líquidos sin alcohol.

10.- Por lo general, hay un primer discurso durante el brindis. Al terminar éste debe beberse solo un sorbo y reservar contenido para el segundo brindis que ofrece el homenajeado”.

En ´cervantesvirtual.com´ nos descubren estos brindis, precedidos de este comentario: “el brindis no ha dejado de ser una costumbre presente en tabernas y bodegas, en bodas y meriendas, acompañando el trago con poemas como estos:

Hermosísimo licor
quién dirá tu parentela,
que sin conocer a nadie
te hallas en todas las fiestas.

¡Ah!, señor, si estoy aquí
ha sido que me han traído
porque si no, no viniera,
porque yo no tengo pies
para dar tantas carreras.

Si quieres saber quién soy
os diré mi parentela:
a mi padre llaman parra
y por apellido cepa;
y luego me hice arar,
nací en sarmiento
y cuando me maduré
me vinieron a cortar.

Me metieron en un cesto,
me llevaron al lagar,
allí me pisan las tripas
y el caldo me hacen echar.

Me metieron en la cuba
y me taparon con tierra,
y cuando criao estuve
me vinieron a probar.

Y salí tan buen danzante,
y con tanta ligereza,
que a todo aquel que me bebe
le hago hincar la cabeza.

¡Sí, señor!
y tú no lo contradigas,
es mejor tener dolor de cabeza
que no de barriga.

Yo ya soy anciano,
y además abuelo,
voy a cuidar bien mi majuelo
porque la muerte
se la ve venir paso a paso
y por eso voy a beber
el vino de este vaso.

Y a partir de aquí, todos los que queramos pues en el buscador podemos encontrar de todo tipo: graciosos, literarios, picantes… todo apropiados para cuantas escenas en torno al vino podamos imaginarnos.